Lola Latorre está atravesando una etapa en la que la facultad le está consumiendo mucho de su tiempo. Se lo pasa estudiando para rendir una serie de finales y, en el medio de esto, problemas de salud que la tienen preocupada y que la llevaron a ir a su médico de confianza porque estaba asustada.
La mandaron a hacer un test SIBO, y luego de dar ese paso, contó: “Acabo de salir y me lo hice porque estoy teniendo muchísimos dolores de panza, me cae mal todo lo que como y la estoy pasando mal. No sé que tengo o qué me cae así. Este estudio detecta un sobrecrecimiento bacteriano”.
Sobre los síntomas, informó: “Te dan ganas de vomitar. Es horrible. Y te dan para hacerse un buche como si estuvieses en el dentista. Una vez que haces eso empezás a soplar por tres horas en un tubo que tiene una maquinita, -aclaró para algún desprevenido- no sin parar, obviamente. Entrás y a la media hora tenés que volver a soplar. Esperás y volvés. Así por tres horas con esos intervalos”.
“Tuve que hacer un ayuno de 12 horas y el día previo una dieta donde no podés comer ni lácteos, ni frutas ni verduras, ni legumbres, ni gaseosa, ni alcohol. Nada de nada. El previo es fiaca porque con la dieta no podés comer nada. Solo comí huevo y proteínas, carne y pollo. Definitivamente sabré que tengo”.
El SIBO es un estudio que revela si hay o no presencia de bacterias en el intestino delgado. En su caso, dio positivo y a partir de ahora tendrá que hacer una dieta y tomar medicación hasta que pueda volver a comer normalmente.