Georgina Barbarossa es una de las actrices y conductoras más queridas del país. Hace décadas está en las pantallas y tambien en las tablas. Ha sido parte de numerosos éxitos televisivos como también teatrales. Siempre ha luchado para mantenerse vigente y activa. Es por eso que sorprendió al revelar una experienca mala en el ámbito laboral.
En diálogo con María Laura Santillán, la famosa respondió qué es lo que nunca volvería a hacer. Sin dudarlo, lo relación con un trabajo de sus comienzos y aseguró que nunca volvería a atravesar algo así en caso de poder elegir.
"Trabajaría todo el día porque soy adicta al trabajo. Trabajé hasta en el Circo de Moscú. Me encanta. Solamente trabajé por necesidad con una persona, fue sumamente desagradable trabajar con Porcel. De poder hacerlo no lo volvería a hacer nunca más. Pero ya está, se murió, caducó, y cada uno lo dice cuando puede", dijo con total claridad.
Luego explicó por qué no contó antes esta experiencia: "Porque si lo hubiese dicho cuando Vasco, mi marido, vivía lo mataba. Cuando me llamó mi representante y me dijo que había quedado en MasterChef yo no sabía si agradecerle o insultarla. A Iliana Calabró se le cayó la tortilla y yo no estoy todo el día cocinando en mi casa. Siempre estoy haciendo dieta. Me gusta cocinar de vez en cuando"-.
Georgina Barbarossa también habló de su vida fuera de las pantallas: "Después del canal hay tres veces por semana hacer gimnasia, tenés que ir a la peluquería, te tenés que depilar, hacer las manos. Trato de ir a ver a mi sobrino nieto, voy a comprar ropa para mi nieta. Reuniones de producción, estoy hablando permanentemente y hablando con mi empleada de la casa que tengo en Córdoba".
La conductora también habló sobre la propuesta de conducir La peña del morfi: "El programa me encantaba. Pensé que iba a ser un problema menor. Pensé que se iba a solucionar. Lo llamé a Jey y le dije: che, te voy a cuidar el rancho. Le avisé. Porque es lo que corresponde cuando te llaman para reemplazar a alguien. Pensé que iba a ser algo momentáneo".
En ese sentido, explicó cómo se adaptó a la nueva rutina: "Después, desgraciadamente es un tema muy heavy metal. Y cuando me dijeron de quedarme dije que sí, porque me divierto. Tengo que estudiar un montón. Es muy largo, pero se me hace cortísimo porque van cantidad de bandas. Hay una mesa de humor que me divierte muchísimo y los mano a mano con los artistas o periodistas me encantan".