Soledad Pastorutti y Jeremías Audoglio se cruzaron en la adolescencia, compartiendo aula en el mismo colegio. Él recordó: "Habíamos empezado a salir cuando terminamos la secundaria". Sin embargo, Soledad matizó esa afirmación señalando que, en realidad, en ese periodo se volvieron amigos.
La artista dio el sí con Jeremías a los 26 años, allá por 2007. En aquellos días, ella manifestó con entusiasmo que se casaba con su primer y único amor. El casamiento fue súper íntimo en el registro civil de Arequito y después armaron una fiesta con apenas 80 personas en la casa de los papas de La Sole.
Para 2010, Soledad Pastorutti quedó embarazada y nació Antonia. Pero la familia quería seguir creciendo y, en febrero de 2013, Regina llegó para sumarse a la banda. Toda la familia de la cantante mantiene un bajísimo perfil, pero cada tanto ella habla de su vida privada y personal.
Respecto a su vida, la artista sigue viviendo en su pueblo natal: “A todos les parece raro y hay quienes no me creen que vivo en Arequito. Viví casi dos años en Buenos Aires en la semana, y los fines de semana volvía al pueblo. Como los estudiantes. Nos casamos sin tener nuestra casa terminada y, al principio, vivimos en la casa de mis viejos. La libertad y la vida de pareja la teníamos más en Buenos Aires”.
En ese lote también vive su hermana Natalia junto a su familia y los papás de ambas. “Comemos todos juntos en un quincho familiar. Lavamos los platos y acomodamos entre todos, y después cada uno se va a su casa. A la noche también cenamos todos ahí: mi hermana es la que menos va porque le gusta acostarse temprano. En el pueblo tengo una vida tranquila. Mis amigas son las de siempre”, relató Soledad Pastorutti sobre la vida en comunidad que llevan.
Tiempo atrás, La Sole habló con revista GENTE sobre sus hijas y contó: "Mirá, no exactamente mis pasos, pero si les gusta el arte las voy a apoyar. Yo creo que el arte, más allá de si se convierte en una profesión o medio de vida, tiene que estar presente en las casas de toda la gente, porque el arte salva".
"Si no es el arte es el deporte, eso le voy a agradecer toda la vida a mi viejo porque además de la escuela, yo iba a la escuela pública y teníamos un solo turno, me hizo elegir una actividad deportiva y una relacionada al arte. Siempre me alentó y me fue muy bien, el deporte me encanta", ahondó.
En otra oportunidad, contó que su hija Regina quisiera seguir los pasos de su famosa mamá. Con mucho orgullo, reveló sobre la menor del clan: "Toca el piano y canta”.