Unas semanas antes de que terminara el año, Juana Repetto se enteró que la dueña de la casa que venía alquilando los últimos años, no pensaba renovarle el contrato ya que su hija tenía intenciones de ocupar la propiedad. El problema se presentó porque la actriz no esperaba esa decisión y no tenía a dónde ir a vivir con su marido y sus hijos.
En las redes, contó que había vendido el PH que ocupaba en Palermo cuando era soltera y que la construcción de la casa que soñaron con Sebastián Graviotto aún no había comenzado, por lo que le urgía encontrar un nuevo espacio. Milagrosamente, los planetas se alinearon y logró dar con una propiedad cómoda, funcional para todos, en la misma zona de la anterior y con un precio de alquiler razonable.
En sus redes, mostró algunas partes de ese nuevo hogar que cuenta con dos plantas y 3 habitaciones, un jardín con pileta y una suerte de galería techada que la actriz aprovechó para colocar allí su juego de sillones, ya que al ser este living más chico que el de la casa anterior, no le entraban.
En el mismo sector donde ubicó su juego de sillones, dispuso los juguetes de los chicos y organizó un espacio que haría las veces de playroom.
Juana compartió con su comunidad la felicidad que siente al ver que las cosas resultaron bastante bien pese a la celeridad con la que tuvo que hacer las cosas y que encima, su marido no estaba para darle una mano porque en esta época, trabaja a pleno en la temporada de invierno de EEUU como instructor de snowboard.