Pese a tener la posibilidad de elegir dónde vivir, Flavio Mendoza prefirió quedarse en el centro de la ciudad. Es por eso que eligió vivir en una casa ubicada en el corazón de Palermo. Ante esto, explicó los motivos por los que tomó esta decisión y dejó entrever algunos detalles de su hogar.
Si bien son muchos los famosos que eligen vivir alejados de la ciudad y en barrios privados aledaños a la city porteña, el coreógrafo y bailarín prefirió instalarse en el centro de la ciudad, más precisamente en Palermo. Es que desde allí considera que tiene una mayor facilidad para poder llegar a los teatros en los cuales se esté llevando a cabo su función.
Sin embargo, esto no significa que debió escatimar en lujos. Es que allí, Flavio Mendoza cuenta con una lujosa casa decorada a su gusto y con varias habitaciones que son utilizadas para el descanso, como es el caso de su dormitorio, y también cuenta con otras para el ocio.
Como atractivo principal del hogar, el coreógrafo cuenta con un enorme living comedor total white. Es que se trata de una enorme habitación en el cual se encuentra la mesa principal, los sillones que rodean el televisor y, sin división, también se encuentra la cocina en este espacio.
Saliendo para el jardín, Flavio Mendoza dejó entrever que tiene una pileta para disfrutar durante el verano y también algunos juegos de plaza para que su hijo pueda disfrutar de este sector. Además, en este sector, como frutilla del postre, cuenta con un Persea americana, el árbol que da palta.
Por lo que en diálogo con Perros de la calle, con quienes mostró los detalles de su hogar, bromeó sobre la decisión que tomó contrarrestando la opinión del arquitecto: “Él quería quitar un árbol, pero yo le pedí que lo dejara en el medio, ya que produce unas paltas increíbles. Con el precio al que están, algún día podría estar vendiendo palta en la puerta”.
Como si todo esto no fuera poco, Flavio Mendoza también cuenta con un gimnasio dentro de su casa. Allí se puede ver que cuenta con algunas pesas y también con lo necesario para pegarle a la bolsa de boxeo a modo de hobbie.