Este lunes 21 de octubre tuvo lugar la primera edición de los Martín Fierro de Cine con la conducción de Benjamín Vicuña y Mariana Fabbiani. Durante la ceremonia, Luis Brandoni fue galardonado en la Usina del Arte con la prestigiosa estatuilla de platino y como no podía ser de otra manera, al subir al escenario para recibir el premio, el actor sorprendió con un fuerte discurso.
Al aceptar la estatuilla, el artista comenzó diciendo: "Es un reconocimiento que no lo tenía agendado. Sobre todo con todos los años, películas, y lo que falta todavía”, lo que generó risas entre los invitados a la ceremonia.
“Estoy muy agradecido”, aseguró Luis con franqueza a continuación para luego expresar su gratitud al público. Fue entonces que el actor de 84 años le pidió permiso a uno de sus colegas presentes para tomar como referencia el discurso que brindó al convertirse en uno de los más destacados de la noche: "Guillermo (Francella), te voy a copiar: yo también tengo mucho que agradecerle al público, muchas gracias".
Acto seguido, Brandoni remarcó: “Hemos pasado por momentos con mucho trabajo y casi nada de trabajo. Momentos en que me tuve que ir de este país con amenazas y con esperanzas” haciendo alusión a su exilio forzado que tuvo lugar en septiembre de 1974, cuando era secretario general de la Asociación Argentina de Actores. Entonces, un día antes del asesinato de Silvio Frondizi, fue amenazado de muerte y obligado a dejar el país en un plazo de 24 horas.
De esta manera, en una noche donde la política se mezcló con el espectáculo, el actor aprovechó la oportunidad para enviar un firme mensaje: “Y sigo teniendo esperanzas en el país porque la gente no quiere más ladrones por todas partes. Tenemos que ser serios".
Por otro lado, Luis -quien regresó a Argentina tras pasar diez meses exiliado en México y luego fue secuestrado por varias horas en 1976 después del golpe militar- recordó: “Yo pude vivir estando en la famosa lista negra”.
“Gracias al público que podíamos trabajar en lugares privados. Y los que se animaban a contratarnos y recibirnos en sus teatros o en su lugar, la gente iba aun sabiendo que corrían algún riesgo. Y sin embargo, fueron y nos dejaron vivir, nos permitieron sostenernos y sostener a nuestras familias”, subrayó.
Finalmente Brandoni, manifestó: “La gente quiso vernos a mí y a otros que estábamos en la misma situación” y culminó: “Por eso, un reconocimiento de esta naturaleza, me emociona y me obliga a seguir siendo como soy y a poder caminar por la calle sin miedo ninguno”.