Luego de una semana complicada en la que hubo muchas versiones encontradas en torno a su supuesta separación de Marynés Breña, Guillermo Francella accedió a dar una nota al equipo de Intrusos y A La Tarde para aclarar qué es lo que está pasando en su matrimonio.
Sin dejar de sonreir, el actor admite que con su esposa están atravesando un momento difícil pero se mostró confiado en que podrían solucionar las cosas. "Estamos... llevamos juntos 38 años entre noviazgo y casamiento. Estamos en esas mesetas que a veces suceden, pero creo que se ha exacerbado todo".
Sobre el silencio que mantuvo en estos días, pidió perdón: "Me ha llamado todo el mundo, les consta que estoy grabando una película muy difícil, metido 12 o 13 horas por día y por eso no he contestado. Está todo bien, no hay nada raro, hoy hablé 3 veces con Marynés, no hay ninguna rispidez, no hay crispaciones".
También se refirió a la polémica nota que le hicieron a su hermano, explicó: "Yo estuve ayer cenando con él. Yo te veo, me acerco y te doy la nota, si estoy canchero lo puedo manejar pero a veces uno no está acostumbrado, te agarran con la cámara prendida y es muy difícil todo".
Guillermo no descarta la posibilidad de reconciliarse con su esposa: "Estamos muy unidos. Estuvimos juntos en el cumpleaños de mi hijo y por primera vez no hemos coincidido en el aniversario porque yo estaba grabando en España y ella en Miami. Insisto, está todo bien. Lamentablemente se ventiló algo que no pensé que se iba a ventilar y como soy una persona conocida, tengo que salir a responder".
Por la tarde, Guillermo frenó unos minutos a conversar con el programa A La Tarde e hizo referencia a la importancia que tiene su nombre en el país y como sobrelleva ser tan reconocido en situaciones como estas: "Soy una persona conocida y la exposición la tengo, pero a veces pienso que de algo se hace una pelota y encima yo no podía salir a hablar porque estaba en medio de la grabación".
Ante la reiterada consulta del cronista acerca de si tenía algo para aclarar respecto de su separación o situaciones que quedaron inconclusas, Guillermo fue tajante y repitió: "No hay nada que aclarar, nada. Los chicos están bien".