A los 40 años, Victorio D'Alessandro continúa marcando su camino en el teatro argentino, destacándose actualmente en la obra Las cosas maravillosas, dirigida por Mey Scápola y presentada en el Multiteatro. En este unipersonal, que previamente fue interpretado por figuras como Peter Lanzani y Candela Vetrano, el ex protagonista de Casi Ángeles muestra su versatilidad y su capacidad de conectar profundamente con el público. En una charla reciente con TN Show, D'Alessandro confesó que siempre soñó con hacer un proyecto solista: "Me gusta encontrar lugares que no haya habitado antes. Yo estaba en España, y hacer teatro en la Argentina me tentó. Siento que fue reencontrarme con mis raíces”, expresó.
El actor, quien saltó a la fama en 2008 interpretando a Luca Franccini en la serie juvenil Casi Ángeles, considera que la exposición de aquellos años fue un aprendizaje invaluable, aunque no estuvo exenta de desafíos. “Fue muy fuerte. Jamás me lo imaginé. Uno no está preparado y me costó entenderlo”, comentó al recordar la popularidad que adquirió. A pesar de haber sido parte del fenómeno de Cris Morena, nunca se sintió encasillado en ese perfil juvenil. Tras finalizar su participación en Casi Ángeles, dio un giro en su carrera al sumarse a Herederos de una venganza, una historia completamente diferente en el canal eltrece, donde asumió un papel más jugado y complejo. “Siento que haber estado en Casi Ángeles fue un hermoso trampolín, una gran ventaja”, agregó.
Además de su éxito en teatro y televisión, Victorio ha tenido una trayectoria multifacética. A los 14 años ya tenía clara su pasión por el teatro, aunque también experimentó en el mundo del fútbol, llegando a jugar en las inferiores de equipos como Argentinos Juniors, Vélez, y Atlanta. Sin embargo, la vocación artística prevaleció y lo llevó a dedicarse de lleno a la actuación. Paralelamente, D'Alessandro estudió en la universidad y se graduó en la carrera de Derecho, aunque nunca llegó a ejercer como abogado. “Terminé las materias, pero no me matriculé. Es más una anécdota la verdad. Haber ido a la universidad me dio amigos y me sirvió para organizar mi vida”, explicó. A pesar de su formación en leyes, Victorio reconoce que la actuación es el ámbito en el que realmente se siente pleno y feliz.
Desde su tiempo en la televisión hasta sus actuaciones en el teatro, la vida de Victorio ha estado marcada por el apoyo incondicional de su familia, especialmente de sus padres, quienes siempre lo alentaron a seguir su pasión. “Ellos siempre estuvieron cuando dije que quería estudiar teatro. Tal vez sin ellos no me hubiese animado”, expresó con gratitud.
En el ámbito profesional, D'Alessandro también se destaca por su trabajo detrás de escena. Actualmente, colabora con una productora, escribe y se involucra en la producción de proyectos que lo apasionan. Entre sus planes a futuro se encuentra el desarrollo de una obra de teatro para la cual adquirió los derechos, y su participación en En el barro, el esperado spin-off de El Marginal.