Han pasado más de cuatro años desde que Lucía Galán puso fin a su relación con Pablo Alarcón, con quien compartió una historia de amor de 15 años hasta su separación a principios de 2020. Sin embargo, la reconocida cantante de 63 años podría estar abierta a la posibilidad de encontrar un nuevo amor, aunque esta vez, con algunas condiciones claras.
Vale recordar que antes de su relación con Alarcón, Lucía estuvo casada con Alberto Hazán, de quien se separó tras varios años juntos. Fruto de ese matrimonio nació su hija, Rocío Luna Hazán Galán. Ahora, en una charla con Ángel de Brito y las panelistas de LAM (América TV), la integrante de Los Pimpinela no solo habló de su presente sentimental, sino que también dejó en claro qué busca —y qué no— en una nueva pareja.
“Estoy solita y con apuro”, dijo con humor la cantante, desatando las risas en el estudio. Sin embargo, rápidamente agregó: “No busco perfil mediático, no es una exigencia que sea famoso”. En este punto, Lucía dejó entrever que, tras años en el ojo público, prefiere que su vida sentimental mantenga un perfil más discreto.
Lucía admitió que no es de las que toman la iniciativa para conocer a alguien, razón por la que confía en el destino o en un encuentro propiciado por amigos. “Siempre antes te lo presentaba alguien. En una fiesta, en un evento, un amigo en común o en una reunión de amigos. Pero yo no soy encaradora, para nada. Soy más chapada a la antigua”, confesó.
También señaló las diferencias generacionales que, según ella, complican un poco las cosas. Entre risas, comentó: “Ahora es una generación toda de los emoticones. Para mí, mandar un fueguito es invitarlo a un asado”.
Aunque se mostró dispuesta a abrir su corazón, Lucía fue categórica respecto a los límites que pondría en una nueva relación. “No compartiría ni cama, ni casa. No me casaría ni compartiría mi casa. Cama afuera, departamento afuera, cada uno con lo suyo...”, aclaró. Su hermano y compañero artístico, Joaquín, no perdió la oportunidad de sumar humor a la charla: “País afuera”, dijo entre risas.
La cantante también mencionó que viaja con frecuencia a España para visitar a su hija y dejó abierta la posibilidad de que el amor llegue desde esas tierras. “Si aparece alguien allá, bienvenido, pero hasta ahora no hubo nada que me interesara. He tenido muchas oportunidades”, concluyó.
Por ahora, Lucía sigue disfrutando de su vida personal y profesional mientras deja que el amor, si ha de llegar, lo haga en sus propios términos.