Entre las siete personas procesadas por la desaparición de Loan Peña, figura Mónica Millapi, quien cumple prisión domiciliaria en Neuquén. En las últimas horas, decidió hablar públicamente por primera vez y compartir su perspectiva sobre lo ocurrido con el niño de cinco años, que sigue desaparecido.
“A Loan alguien se lo tuvo que haber llevado. Se lo buscó muy rápido, por lo que tendría que haber aparecido enseguida”, afirmó Millapi, esposa de Daniel Ramírez, quien estaba presente en el naranjal el día en que Loan desapareció. También expresó: “No sé si se lo llevaron por un accidente o por algo más”.
En una entrevista con A24, Millapi confesó: “Muchas veces me pregunté qué pasó con Loan”. Con un tono conmovido, añadió: “Quizá por mi instinto de madre, esto me afectó mucho. Sentía una responsabilidad enorme sobre algo que no estaba en mis manos, especialmente porque ni siquiera lo conocía bien”. A pesar de sus palabras, la fiscalía sostiene que Millapi habría sido parte de un plan para sustraer y ocultar al menor, una acusación que ella negó categóricamente. “Creo que alguien debe saber qué pasó con él. Alguien tuvo que haber visto algo”, insistió.
Según su relato, el 13 de junio ella y su esposo asistieron al almuerzo en casa de Catalina, la abuela de Loan, invitados por Antonio Benítez, otro de los imputados. “Llegamos tarde, casi para comer. Después del almuerzo, Benítez fue el primero en ir al monte. Mi marido lo siguió porque acababa de terminar de comer, y luego Laudelina (Peña) me invitó a buscar naranjas. Fuimos juntas, y todos los niños nos siguieron”, detalló.
Respecto a Loan, Millapi aseguró haber tenido poco contacto con él. “Apenas lo conocía. Era la primera vez que lo veía y no sabía quién era. El plan era simple: ir a buscar naranjas. En el camino, mi marido se perdió y tuvimos que indicarle la dirección hacia el naranjal. Después nos enteramos de que Loan había desaparecido”.
Millapi recordó que intentaban cuidar a los niños mientras avanzaban hacia el monte. “Les decíamos que tuvieran cuidado, pero los chicos iban corriendo. Eran seis en total”, comentó.
Otro detalle que llamó su atención fue la presencia de personas desconocidas en la casa de Catalina. “Nos pareció extraño ver gente allí. Habíamos ido otras cinco veces y nunca había nadie más, aparte de Benítez y su familia”, señaló.
Finalmente, Millapi manifestó su esperanza de que pronto se esclarezca lo ocurrido con Loan. “Estoy esperanzada de que se sepa la verdad”, dijo. También expresó su decisión de no regresar a Corrientes: “Me siento segura en Neuquén. No quiero volver a 9 de Julio”.