Poco después de que explotara el Wandagate en los medios, Wanda y Mauro Icardi se reconciliaron. Sin embargo, ella viajó a la Argentina y se empezó a mostrar muy cerca de L-Gante. Si bien en un primer momento se habló de amistad, no tardaron en surgir rumores de romance que se potenciaron cuando se los vio en un boliche juntos y a los besos.
Ella protagonizó un video con él, dejó abierta la puerta de que algo más había entre ellos y al final, viajó a Turquía para estar con Mauro.
El tiempo pasó, L-Gante cayó preso y todo pareció enfriarse. Públicamente tomaron distancia hasta que él, ya en libertad, admitió que había estado enamorado de Wanda y metió la pata. Según Pochi de Gossipeame ese habría sido el detonante para que la mediática lo borrase de un plumazo de su vida. "Ella se enojó cuando él habló de una relación que para ella, no fue tal", detalló la experta en redes.
Parece que al hablar de más, L-Gante se ganó el bloqueo de su ¿ex amiga? y desde entonces, ella no querría saber nada más.