Fue una noche más que especial para Federico Bal, quien recibió a su mamá, Carmen Barbieri, sobre el escenario del Teatro Roxy Radio City, en Mar del Plata, donde protagoniza el musical Kinky boots. El actor está instalado desde fines de diciembre en La Feliz y tiene previsto quedarse hasta marzo ya que es la cabeza la compañía junto con Sofía Pachano y Germán Tripel.
Anoche, una vez que finalizó la función, Fede pidió un aplauso para su mamá, quien subió al escenario y fue ovacionada por el público presente. "Hoy está acá una artista que todos quieren y todos amamos pero yo la quiero más porque es la que me dio todo y me hizo amar esta carrera, este oficio: mi mamá", arrancó Fede.
La conductora de las mañanas de Eltrece subió al escenario, recibió un ramo de flores y expresó: "Gracias, muchas gracias amor. Dame un beso, no importa la transpiración. Esa es la transpiración del trabajo, del talento y del trabajo. Vi Kinky boots en Londres, en Nueva York, luego en Buenos Aires y en Carlos Paz. Ahora en Mar del Plata y la Lola que hacés, Fede, es insuperable. Estoy orgullosa de los artistas argentinos. Son muy talentosos, ¡bravo!".
Con micrófono en mano, Barbieri le reprochó a su hijo: "Después de Mardel, ¿adónde te vas? Te pregunto acá porque nunca me contás nada". Mientras el público se reía, Fede hacía morisquetas. "Así es nuestra vida, todo arriba de un escenario", respondió Bal.
En diálogo con Pronto, la Leona agregó: "Estoy tan emocionado de ver a mi hijo haciendo de Lola y a Kinky boots en general, con un elenco maravilloso. Todos talentosos que dejan la vida en el escenario, es mucho tiempo, muchos cambios, todos empapados de talento. No pueden perderse este espectáculo que está en Mar del Plata.
Luego, Fede también le hizo un reproche a su mamá y contó qué le molesta de la conductora. Resulta que Carmen estará parando todo el finde en la casa de su hijo famoso y a la madrugada no lo deja descansar. "Mamá es adicta a Tik Tok, se pasa toda la noche mirando videos a un volumen nivel mil y no me deja dormir", le recriminó Fede a Carmen, quien se reía a su lado. ¡Cosas que pasan!