La historia de amor y desamor entre Daniel Osvaldo y Jimena Barón es de público conocimiento. Si bien hoy en día elige no volver a opinar de él, especialmente por respeto al hijo que tuvieron juntos, todos conocen lo vulnerable que se ha sentido tras la ruptura y el sufrimiento que le han generado los destratos de su ex, la falta de interés por la crianza de Momo y otras cuestiones similares.
En este contexto, resultó inevitable que todos fueran a buscar su punto de vista a partir del video que subió Osvaldo hablando de su salud mental. Sin ánimos de polemizar pero tampoco de lavarse las manos, escribió: "Me hubiese gustado que los chicos sean prioridad y poder protegerlos de todo esto que me entero por el mismo video de Instagram que vieron ustedes. Yo no tengo la posibilidad de quedarme en mi casa, esquivando las preguntas que esto genera. Tengo que trabajar e ir a buscar a mi hijo al colegio", sentenció claramente enojada.
En cuando a la depresión que expuso su ex, Jimena también fue a fondo: "Soy una mamá que a pesar de todas las que pasó, incluyendo problemas de salud mental, se ocupa sola hace 10 años, 24/7 de su hijo. El papá de mi hijo contó conmigo, siempre estuve y estaré. Se alejó por decisión propia, sin darnos explicaciones".
Luego, cerró pidiendo paz, por Momo: "Mi hijo es menor de edad y mi prioridad es que él esté bien, que siga con su vida normal, cuidarlo y protegerlo siempre".