Mientras estuvo en la casa de Gran Hermano, Lucía Maidana estuvo muy cerca de Rosina Beltrán. El público vio un posible romance entre ellas, pero había un pequeño detalle: ella ingresó estando en pareja. Por lo tanto, todo quedó en un juego, en un deseo que quedó trunco, al menos desde un lado, pero parecería que del otro también.
A saber, apenas quedó eliminada, ella se separó de su novia Virginia, con la que estuvo 4 años. En Entrometidos le consultaron si su relación tan cercana con la uruguaya tuvo que ver, y no lo dudó: “Un poco sí”, contestó. Del otro lado, Rosi siempre tuvo la ilusión del reingreso de la salteña.
Incluso, muchos de los otros participantes la cargan con eso, y ella sonríe. Siempre admite sus ganas de verla, y seguramente eso se dé cuando ella salga del reality. Pero en el mientras tanto, Lucía sigue hablando, y esta vez no se reprimió nada. A tal punto, que luego se arrepintió de sus palabras.
En su paso por el streaming de Gran Hermano, le leyeron una consulta. “¿Acá preguntan si sos una persona romántica y si te gustaría que Rosina te bese los pies?”. Para algún desprevenido, Rosi se confesó amante de esa práctica, y lo llevó adelante con varios en GH.
“Rosina, que me haga todo menos los pies”, soltó Luchi, casi sin pensarlo. A tal punto, que luego de su honestidad brutal, se arrepintió: “¡Cortá eso! Cortame eso, por favor”. Pero no, ya había salido al aire.