1. El teatro marcó tu destino desde antes de nacer porque …
Mi padre era bastante bohemio. Vivía en un teatro independiente y tenía un trabajo en la municipalidad. Estaba casado y mi mamá también estaba casada con otro señor. Mi papá sacaba los colchones de abajo del escenario y dormía arriba. Mi mamá pasó por ese colchón y fruto de ese amor prohibido, aquí estoy. De alguna manera ser concebido en un escenario me marcó a fuego, cosa que me enteré mucho después. Saberlo me dio la certeza que había algo anterior, que me convertí en lo que soy.
2. El hombre y sus muñecos fue…
Un unipersonal que hacia mi papá, yo tenía tres, cuatro años y me lo sabía de memoria. Un día estaba en la platea diciéndolo antes que él, me sacan de la platea y me suben al escenario. Entre bambalinas descubrí esa magia del teatro. El público estaba mirándolo a mi papá y podía espiarlos. A esa edad supe que el teatro era el lugar donde quería estar.
3. A los nueve años te mandaron a un curso de teatro…
Primero me anotaron en un curso gratuito en un sindicato pero se suspendió. Después me llevaron a una primera entrevista con Alejandra Boero. Ella me preguntó por qué quería ser actor y yo le respondí que podía ser un príncipe, un mendigo, un superhéroe malo, uno bueno. Me preguntó que pasaba cundo me bajaba del escenario y mi respuesta fue “cuando me bajo del escenario soy Luciano”. Entré a su escuela y estuve 10 años. Ahí me formé como actor y como hombre de teatro. Alejandra y su escuela te enseñaba todo, no sólo los distintos géneros de teatro desde los griegos hasta la actualidad sino también a barrer, electricidad, carpintería. Fui boletero, acomodador. Todo con mucha pasión, rigor y disciplina.
4. Cuando decidiste vivir solo tu primera vivienda fue…
A los 19 años quería independizarme y con un grupo de amigos armamos Quintino, un espacio cultural. Yo vivía en el altillo que además era la cabina de luces. Quintino fue una sala de teatro, con mucha fuerza y mucha bohemia. Estuvimos seis años compartiendo casa y lugar de expresión, de investigación. Además di mis primeros pasos como director.
5. Tu experiencia como estatua viviente…
Fue para una publicidad de jabón en polvo. Uno se buscaba la vida como como podía y de alguna manera era estar un poco más relacionado al arte. Era un promotor y me quedaba quietito y muy concentrado. Había que darlo todo no solo para que me vaya bien, también para ganar unos mangos. Con el paso del tiempo recuerdo esa experiencia como algo divertido y digno.
6. Un encuentro que te marcó la vida…
Todos y cada uno de los encuentros me han dado mucho y me han hecho conocer más quién soy . Pero si tengo que destacar un momento es el día que Leonor Manso me invitó a que la dirija por primera vez en una obra, algo que haría otras veces. Ese encuentro con ella fue un encuentro con el oficio y con el arte, pero sobre todo con un gran ser humano en todos los aspectos y con la que hoy somos familia.
7. La puntualidad es…
En la escuela de Alejandra Boero la puntualidad era clave y de alguna manera yo soy re puntual. Quizá soy impuntual porque llego antes. No me gusta esperar ni que me esperen. Valoro mi tiempo y el tiempo de los otros.
8. Un mal día cambia a buen día cuando…
Estoy con Amelia, mi hija. La vuelta a casa, estar con ella, irla a buscar el cole o cualquier plan. Lo mejor que me puede pasar es ser padre.
9. Si pudieras tener una charla con Maradona, Shakespeare o Alfredo Alcón…
A Shakespeare le diría, no puedo creer todo lo que escribiste y cómo hablaste también sobre lo que somos los seres humanos. A Alfredo gracias por tanto, dejaste la vara muy alta como persona y como artista. Y a Maradona que era un mago.
10. Le tenías fobia a la televisión hasta que…
Venía de una escuela de un teatro más social, político, de compromiso. En ese momento la televisión, lo comercial, la publicidad era casi prostituirse. Pero luego de mi primer trabajo comercial tuve la suerte de que Alejandro Boero me vio, me citó y me dijo que estaba orgullosa de que actores que se habían formado con ella empezaran a ocupar otros espacios. Eso me dio un permiso, una tranquilidad de hacerlo sin culpas y empezar a disfrutar.
11. Una película pochoclera que siempre te engancha…
Muchísimas, pero ET me parece preciosa, preciosa. Después las de Indiana Jones también me encantan. Me gusta como mezcla aventuras, historia. Me divierte y me hace acordar mucho a mi infancia porque mi madrina me llevaba siempre a ver ese tipo de películas.
12. La última vez que lloraste de risa…
No me acuerdo, pero sí que me tenté mucho haciendo El beso en Mar del Plata. Teníamos una comunión preciosa con los compañeros y en escena más de una vez nos hemos tentado. Es espectacular hacer una comedia, que nos podamos reír y eso en el público estalla por mil. Es un momento precioso.
13. Si tuvieras mucho dinero…
En principio, le dejaría la vida re tranquila a mi hija. Después, viajar mucho y repartir, repartir, repartir con los seres queridos. Hacer muchas pelis, muchas pelis, muchas obras y ayudar a otros a que las hagan. Me encantaría ser un gran mecenas del arte.
14. En tu vida Leonor Manso representa…
Ya la nombré antes. Es una compañera de viaje, una maestra, una amiga, una madre adoptiva y una abuela para mi hija porque se eligieron mutuamente. Una vez Leonor se sentía mal y la fui a cuidar y Amelia me dijo que la quería como una mamá. Le respondí que sí que la tenía ahí como una madre y ella a mí como un hijo. Entonces me propuso que como no tenía abuela, porque todas fallecieron si ella podía serlo. Así fue la llamó a Leonor y le preguntó “¿No querés ser mi abuela?” y Leonor le contestó, claro que sí. Hace unos días, el 16 de abril, cumplió 81 años y estuvimos visitándola, llevándole un regalito.
15. Algo que hacés bien pero te gustaría hacer mejor…
Soy una persona exigente. Me gustaría hacer mejor todo, todo, todo, todo.
16. Tu experiencia en un lugar swinger…
Esta anécdota me la piden muchas veces también. Éramos seis amigos y dábamos como tres parejas aunque no lo éramos. Estábamos aburridos, fuimos a una fiesta trunca y luego a otra. Uno propuso de ir a un lugar donde entrábamos gratis pero teníamos que armar parejas. Ahí fuimos, y la verdad que me impresionó mucho. No me animo yo a participar a tanto, todavía. No tuve la necesidad o no se me despierta, pero festejo la libertad y el goce de los otros.
17. Hasta que ganaste el Martín Fierro 2022, como Mejor actor protagónico de ficción por La 1-5/18, a falta de estatuilla te llevabas…
Fui como a seis entregas y como no ganaba nunca me llevaba a los centros de mesa. ¡Algo me tenía que llevar!
18. Lo más osado que hiciste para enamorar a una chica…
Algún viaje cuando era más joven, que obviamente era con mucho más esfuerzo. Viajar para reencontrarme con alguien a ver si era la distancia lo que envolvía ese misterio del amor o si era real.
19. Sí o sí hay que ver “El beso” porque…
Porque en estos tiempos la comedia nos da la posibilidad de reírnos y reflexionar, también sentirnos identificados con lo que viven y padecen estos personajes y cómo todavía a los 30, 40, 50 la vida te da nuevas oportunidades para dar el volantazo y ser más feliz. (La obra se presenta de jueves a domingo en el teatro Astral).
20. “Muerde” es…
Mi primer unipersonal, mi salto al vacío más potente y una gran experiencia en el teatro. Es una obra escrita y dirigida por Francisco Lumerman, creo que logramos juntos generar una experiencia. El que ve Muerde no sale como entró. Al que va le pasan un montón de cosas emocionales, visuales y también le queda mucho para preguntar, para preguntarse y reflexionar. (Se sube al escenario todos los domingos en Moscú teatro y a partir de mayo en Timbre 4).
21. Aprovechar lo vivido y los años de trabajo te sirve para….
Darte cuenta que lo tenés que seguir intentando y que nada está preestablecido, que todo se puede ver de otra manera, que uno puede ser mejor. Te sirve para saber que no hay que hacer las cosas de taquito, que hay que vivir el presente y que siempre un nuevo punto de vista sobre hasta lo más cotidiano te puede sorprender y generar un cambio
22. Entre Luciano Castro y vos en “El beso” el que se lleva más suspiros de la platea es…
Obviamente, el que se lleva más suspiros en la platea es Castro. Es un tipo que tiene un imán, un talento, un don. Es un enorme ser que tiene esa brutalidad y la ternura. Castro es uno de nuestros grandes protagonistas.
23. Si pudieras cambiar una cosa de vos sería…
Creo que soy demasiado responsable y me preocupo demasiado por cumplir, por llevar a cabo el compromiso que asumí. Debería importarme menos todo.
24. A los cien años te gustaría llegar…
Por sobre todas las cosas sano física y mentalmente. No quiero ser una carga ni una molestia para nadie.