Su nombre completo es Natalia Oreiro Iglesias Poggio Bourié. Nació el 19 de mayo de 1977, en una clínica de Villa del Cerro, un barrio de Montevideo. Inquieta, desde chica la obligaban a dormir la siesta, ella se resistía porque sentía que "perdía la mitad del día". Solía ponerse distintos disfraces y jugaba a ser actriz después de la escuela. En su infancia se mudó treinta veces."Calculo que era una necesidad de superación de mi familia. Nosotros somos de u barrio de Montevideo que se llama El Cerro, que yo amo profundamente. Y ellos siempre buscando un mejor porvenir para su familia, fueron mudándose hasta que encontraron su casa propia", explicó la cantante en el ciclo Caja Negra.
A los 16 años sola y sin trabajo vino a la Argentina desde Uruguay. Invirtió todo lo que ganó como Paquita de Xuxa para instalarse en Buenos Aires y presentarse en distintos castings. La rebotaban en todos. “Al principio me decían que era la uruguaya bruta que nunca iba a poder hablar, y que los extranjeros sólo venían a este país para trabajar de mozos”, contaría de aquella época.
Empezó con un pequeño papel en Inconquistable corazón. "A los 9 años, nunca me perdía Clave de sol porque estaba enamorada de Pablo Rago y Leo Sbaraglia. Entonces, cuando lo ví (a Rago) en Inconquistable me morí", revelaba en PRONTO. Después fue sobrina de Patricia Palmer en Dulce Ana y la única actriz entre las modelos de la novela 90 60 90.
La imagen de su primera tapa en PRONTO. En esa entrevista admitía que era una chica de 19 años poco común. "Soy distinta porque elegí otras cosas. Lo normal sería que alguien de mi edad recién empiece a trabajar, pero hay muchas chicas que tienen que dejar de estudiar para mantener su casa. Yo no tuve la necesidad sino que elegí otra vida. La gente cree que si estás en la televisión ganás dinero fácil y yo laburo 14 horas por día".
Con un pequeño bolo en Inconquistable corazón, le pidió a Víctor Agú, el autor de la novela que le diera más letra. Admirado por su osadía, Agú accedió y Natalia tuvo su bocadillo. Cuando se emitió ese capítulo, Agú recibió un llamado de Alejandro Romay que le preguntaba quién era esa chica. Le respondió que no sabía su nombre mientras pensaba ‘este me va a matar’. Temeroso, le preguntó si no le había gustado pero el Zar le ordenó/vaticinó: “Ponela más. Esa chica va a ser protagonista” y empezó a pedirme que le diera más texto porque ‘necesito verla más y probarla’". Con ese ojo increíble para descubrir talentos, Romay decidió darle el protagonismo de su nueva novela: Ricos y famosos.
Diego Ramos y Natalia Oreiro protagonizaron en 1997 la novela Ricos y Famosos. Esta fue la primera ficción en la que el actor participó y siempre asegura que tiene recuerdos "imborrables" de las grabaciones. Uno de los más graciosos es que para una escena ambos debían protagonizar un accidente vial. Natalia tomó el volante pero como no manejaba bien chocó de verdad. "La persona que había alquilado el auto (a la producción) se agarraba la cabeza. Te juro que me acuerdo como si fuera hoy", contó en al programa Poco Correctos.
"Creo que vendo la imagen de buena, y esto se trata de vender un producto, pero me encantaría hacer de mala y sería bárbaro porque yo no soy tan santita. Puedo hacer cosas terribles con esta carita de ángel. Sé que mi cara hace que me elijan de buena, aunque... miren que la cara confunde. No soy tan buena como parezco", admitía en una de sus primeras entrevistas con PRONTO.
A la semana de estar en la Argentina se puso de novia con Pablo Echarri. En su primera cita, el actor le dijo que la pasaría a buscar a las 10 de la noche. Llegó una hora y media tarde a bordo del Fiat 128 del papá. “No podía creer que un chico me dejara plantada. Estaba totalmente indignada”. La relación duró siete años.
Cuando se enamoró de Echarri al poco tiempo comenzaron a convivir, sin embargo tardó meses en decírselo a sus padres. "Durante cinco meses alquilé un departamente para que cuando me visitaran creyeran que vivía ahi. Cuando venían iba al supermercado, equipaba un poco la heladera, limpiaba y trataba que la casa pareciera habitada. Pero se dieron cuenta y les dije la verdad", revelaba en una nota con PRONTO. Para ella era muy importante convivir "porque muchas veces no sabés con quien te estás casando y por eso ocurren los divorcios". Al principio la convivencia con Echarri fue compleja. "Yo era muy obsesiva con el orden y la limpieza. Pablo se enfermaba porque si bien es muy limpio no es maniático. Eso sí me encanta cocinar y a él le encanta comer, así que prueba todos mis inventos".
No soporta escuchar a la gente masticar goma de mascar cerca suyo. Esto se debe a una condición que padece llamada misofonía que la lleva a no soportar ciertos sonidos. Además, colecciona inodoros antiguos y le encanta andar en bici pero odia hacer gimnasia.
Camaleónica, su pelo fue objeto de múltiples transformaciones. De melena castaño natural, pasó al pelirrojo, al chocolate, al negro y también se animó rubio. Osciló entre rulos salvajes y lacios extremos. Cambió del pelo largo al corto. Adoptó un flequillo Betty Page que solo podía quedarle bien a un rostro como el de ella.
"En mi casa soy súper relajada. Me pongo fuerte con las cosas que tienen que ver con mi carrera o cuando tengo que poner límites en alguna cuestión. Pero después tengo una personalidad muy tranquila. Soy sencilla y no necesito grandes cosas para ser feliz. Cuanto menos peso tengo y menos peso siento en la mochila, mejor vivo", aseguraba en PRONTO.
"Pensé que el pelo corto me iba a quedar muy mal. Después me gustó porque se me ven mucho las facciones y se me destacan los ojos. Pero aunque me hubiera quedado horrible, para mí iba a estar bien porque iba a servir para mi personaje", admitía en PRONTO luego de uno de sus tantos cambios de estilismo.
Invitada a Sábado bus, el ciclo que conducía Nicolás Repetto, llegó a la final del juego del "corchito", donde los invitados debían embocar un corcho en una copa para ganar un auto 0Km. En el 2011 invitada al mismo programa causó un pequeño revuelo mediático porque embarazada de cuatro meses lució un vestido largo violenta con un sensual e interminable escote. Su look fue criticado en ese momento Twitter, hoy X. Flavia Palmiero escribió: “¿Perdón? ¿Y ese escote? Mmm, para una cena... Sorry, ¡es divina pero no va! No queda bien frente al plato... Claro, como es cool en este país, ¿no se puede equivocar? ¡Siempre está divina pero para esa mesa no va! Es mi opinión”.
Selectiva para dar entrevistas, sin embargo Natalia posee una amabilidad única con sus fans. Jamás se enojaba con los que la esperaban en la puerta de su casona de Palermo y firmaba todo lo que le acercaban. La vivienda estaba ubicada en un pasaje muy elegido por quinceañeras para producciones de fotos. Si la estrella salía en ese momento y una ilusionada adolescente le pedía sacarse una foto, no solo accedía sino que hasta se producía para no arruinar ese momento único en la vida de la adolescente.
En el año 2004 para su papel en la novela “El deseo” se cortó el cabello y se tiñó de rubia. Además aprendió trapecio fijo, trapecio a vuelo, cuerda liviana, aro y acrobacias combinadas. Tomaba clases de tres horas diarias. El programa arrancó con 27,1 puntos de rating pero en las sucesivas emisiones comenzó a caer ante Padre Coraje protagonizado en el 13 por Facundo Arana y Nancy Dupláa. El público no se enganchó con una trama donde Oreiro mantenía relaciones simultáneas con tres hombres y un contenido sexual alejado del registro que la había consagrado.
"Para determinadas ocasiones me encanta arreglarme. Como a todas las mujeres. Por ahí hay gente a la que no le gusta arreglarse nunca. A mí me encanta, pero por un ratito después me resulta incómodo", admitía en una entrevista con PRONTO. Además revelaba un secreto antes de un evento importante le salían granitos en la cara. "Es por el estrés: a algunos le sale una úlcera y a mí me salen granitos".
La primera salida con foto de su romance con Ricardo Mollo fue para ver un largometraje de la banda La Renga en un cine de la calle Corrientes. El líder de Divididos y ex integrante de Sumo tenía 44 años y le llevaba 20. Separado, padre de dos hijas con un pasado de excesos se curó volcándose al vegetarianismo y el budismo. Después de su ruptura con Echarri y antes de su romance con Mollo, Natalia vivió fugaces relaciones con otros dos músicos: Iván Noble y Andrés Calamaro. Antes de enamorarse de Natalia, él convivió diez años con la cantante Érica García.
Con Mollo se casaron en secreto en un pequeño velero frente a la costa de la isla de Fernando de Noronha. Solo estuvieron presentes los novios, el capitán, un marinero y una mujer que filmó la ceremonia. Después de dar el sí comieron un sencillo bizcochuelo relleno de dulce de leche y bañado en chocolate preparado por la flamante esposa. El toque romántico fue la decoración: un corazón recortado en papel rojo con las letras R y N. El outfit de ella fue un sencillo vestido blanco y una corona de flores que hizo con sus manos. Para el novio ni ambo y mucho menos smoking. Lució malla, remera y zapatillas.
.Natalia viajaba a Rusia para presentarse en el festival Superdiscoteca en San Peterbusgo. En Ezeiza PRONTO la descubrió con su familia. Mollo llevaba las valijas en sus manos y cargaba al entonces pequeño Merlín Atahualpa. Después de su presentación, ella volvió a la Argentina para protagonizar con Adrián Suar, Solamente vos.
Oreiro trabajaba en Colombia cuando se enteró que estaba esperando a su primer hijo. Cuando el rumor comenzó a circular con fuerza decidió confirmar la noticia en el living de Susana Giménez. Aunque suele ser reacia a realizar producciones con su hijo, sí participó en eventos solidarios.
En una televisión con otro presupuesto con Facundo Arana viajaron al Mundial de Alemania para filmar escenas de Sos mi vida, la exitosa novela de Pol Ka. Luego de grabar en Gelsenkirchen y Frankfurt, rodeados de hincha vieron el partido de la Selección ante Serbia. Mitad en broma, mitad en serio Natalia aseguró que "si me ven los uruguayos con la camiseta de Argentina me linchan".
La Oreiro ama vivir cerca de la naturaleza. Su hobby predilecto es la jardinería. Admite que tiene "manos verdes" y que "todas las plantas me prenden porque las cuido con amor". En el 2014 contaba que "trasplanté 3750 árboles en mi vida" y declaraba: "Siento una conexión profunda con todo lo que venga de la naturaleza. Me fascina plantar una semilla o sacar una zanahoria. Es algo simple pero mágico".
Con la colaboración de Giselle Billordo