Juana Viale habló de su hijo Silvestre Valenzuela, fruto de su relación con el actor chileno Gonzalo Valenzuela, en la última emisión de "Almorzando con Juana", luego de que el actor chileno revelara públicamente su diagnóstico de epilepsia.
En la mesaza hablaban con Benjamín Vicuña, amigo de Valenzuela, por la crianza de sus hijos adolescentes. El chileno tiene tres varones de su relación con Pampita: Bautista (16), Beltrán (11) y Benicio (9); que están transitando esa edad especial en la vida de los chicos. Además, fueron padres de Blanca, la niña fallecida hace varios años. Los dos más pequeños son Magnolia y Amancio, fruto de su amor con Eugenia "La China" Suárez.
Durante su conversación, Juana le preguntó cómo es convivir con adolescentes. Benjamín contó que está "amarrado" a su profesión y está mucho tiempo en Argentina y transitando la paternidad desde ese lado especial. "La adolescencia papá, nadie me lo dijo", confesó.
A continuación, Benjamín le preguntó a Juana sobre Silvestre (16), sabiendo el vínculo de amistad que une a los chilenos hace años. La respuesta de Viale fue concisa pero afectuosa: "¡Bien, bien. Lo amo, es un salvaje!".
Aunque breve, la respuesta de Viale transmite tranquilidad sobre el estado de salud de su hijo, a pesar de la reciente revelación de su padre sobre su condición médica.
LA SALUD DEL HIJO DE JUANA VIALE Y GONZALO VALENZUELA
Juana es madre de Ámbar de Benedictis (21), Silvestre Valenzuela (16) y Alí Valenzuela (11). Tristemente, perdió un hijo del actor chileno en 2011, que recibió el nombre de Ringo.
A la conductora no le gusta hablar mucho de su vida íntima, que resguarda bajo cuatro llaves. Mucho menos en estos días donde su ex y padre de su hijo dio detalles de su enfermedad. En una entrevista, Gonzalo confesó que reveló que pensó que se moría, en lo que fueron duras palabras de transmitir.
"Fue súper fuerte. Yo estaba acá, en mi casa, y mis hijos me pidieron dormir en mi cama. Cuando me fui a acostar, desperté con unos golpes y no entendía qué estaba pasando. Silvestre estaba en un estado irreconocible. Pensé que se me había muerto en un minuto, estaba pálido, con los labios morados. Estuvo inconsciente mucho rato después del ataque", confesó el actor en febrero pasado.