Desde que subió al protagónico de Sex, la transgresora obra de Muscari, Julieta Ortega levantó su perfil, brinda entrevistas más seguido y no tiene pruritos a la hora de hablar de su vida personal. La actriz, que la rompe de jueves a domingos en el Gorriti Art Center, brindó una extensa nota al periodista Nico Peralta para Pronto en la que habló de todo.
Sobre su hijo Benito, que tiene 18 años y es fruto de su relación con el músico Iván Noble, contó: "Nosotros tenemos una relación muy íntima y él tiene una mamá actriz. No soy una mamá convencional. Trabajo desde que él nació y volví al ruedo cuando él tenía tres meses. Benito se crió en un set de televisión y en camarines de teatro. Entonces, para él es natural y te podría decir que de todo lo que hice hasta ahora, Sex es lo que más le interesó".
Y agregó: "No suele venir dos veces a ver algo de lo que hago y a Sex ya fue dos veces. Y ahora va a ir con su papá, que cuando vio lo que estaba publicando en redes me dijo: ´Bueno, voy a armar una mesa con amigos. Me parece que me voy a divertir´. Y le respondí. ´Sí, la vas a pasar bomba´. Todo el mundo que vino a verla, me dijo lo mismo: ´Salimos muy arriba´. El espectáculo genera eso: energía, alegría, todo muy arriba".
-¿Con Iván Noble tenés un vínculo de amigos?
-No sé si amigos. Somos una pareja de padres, que es mucho para compartir con alguien. Es de las cosas más importantes que podés compartir con otra persona: un hijo y su crianza. Tenemos una responsabilidad muy grande, un respeto mutuo y creo que a los dos nos gusta quien es el otro. Nos consideramos mucho. Yo considero mucho su opinión y hablamos un montón de Benito, aunque ahora cada vez menos porque él ya es grande, tiene su teléfono y habla con los dos por separado. No es como cuando era chiquito, que había que arreglar todo el tiempo cosas y combinar. Sí es un tipo que me consulta cosas de su trabajo y yo del mío. No sé si somos amigos pero tenemos una relación de cariño y respeto. Y la complicidad que significa compartir un hijo.
-Habla de la madurez de ustedes. No todas las ex parejas se llevan bien, incluso muchas se separan odiándose. ¿Fue un laburo enorme?
-En mi caso, no fue un laburo enorme. Se dio así, ¿sabés? Te miento si te digo que fue un trabajo grande. Tuve suerte en mi separación; la suerte que tal vez no tuve en el matrimonio porque sino no se hubiera terminado a los siete años. O por ahí sí. Hoy siete años es un montón y, de hecho, no volví a estar con nadie ese tiempo. No me volvió a pasar. En términos prácticos, nos terminamos separando y la separación fue en todos los buenos términos que pueden darse. Lo cual no me significó un trabajo muy grande llevarme bien después.
-Tus papás están juntos de toda la vida. ¿Es un peso extra su mirada cuando uno desarma una pareja y ellos tienen un matrimonio tan ejemplar?
-No. Para mí no lo fue porque yo nunca proyecté eso para mi vida. Siempre pensé que está bueno ser hija de este matrimonio y estar en esta familia que siempre se mantuvo unida porque me beneficié mucho de eso. Obviamente no es lo mismo tener a los padres en la misma casa que no tenernos. Soy totalmente consciente de eso; no es que creo que da igual. Sin embargo, por como soy yo y por lo que me conozco desde muy chica, siempre supe que había muchas chances de que yo no corra con esa suerte y que ese no fuera mi destino. No lo tomé así, como un fracaso.
-¿Tu hijo vive con vos?
-Sí. Vive conmigo y está mucho con su papá, sobre todo los fines de semana. Pero no tenemos un régimen. Su vida está en mi barrio, en Palermo y su papá vive en Zona Norte. Pero también lo ve mucho al padre, sobre todo cuando no está de gira. En la semana, Iván pasa un rato por casa y come con Benito. Pero vivir, vive conmigo.
-¿Estás soltera?
-Sí.
-En tus redes pusiste como requisito “que viva en Mar del Plata”.
-Eso fue un chiste porque me gusta mucho Mar del Plata. Lo puse hace poco porque amo esa ciudad. Hace dos años, hice temporada de Perdida Mente en Mar del Plata y me enamoré de La Feliz. Pero ahora cada vez que tengo tres días libres, voy para allá. En mi último viaje, puse eso pero no deja de ser un chiste de Instagram.
-¿En qué te fijás a la hora de conocer a alguien?
-¿Sabés que no lo pienso mucho? Porque el amor llega y a veces te desestructura por completo. Lo que pensaba que era un requisito, deja de serlo. No lo sé. No sabría qué decirte. Sí sé que no podría estar con alguien que tenga inconvenientes con mi trabajo. He escuchado a hombres decir: “Yo no podría a salir con una actriz o no me bancaría una novia que haga determinadas escenas”. Bueno, sería muy difícil de llevar adelante una pareja con alguien así y no estaría dispuesta a resignar nada de lo que hago ni en mi vida profesional ni personal por una pareja, sobre todo a mi edad que ya estoy hecha. Tengo la vida que tengo, la disfruto y la elijo muy conscientemente. Tal vez, sería lo único. Después no pienso en edades o en donde tiene que vivir.
-¿Te gustaría encontrar el amor o estás bien así, con la soledad?
-Con la soledad soy de las personas que mejor se lleva. Al menos de la gente que conozco. Realmente me llevo muy bien y puedo estar mucho tiempo sin estar en pareja. Y sentir que mi vida es genial así como está. Pero después, cuando aparece y me enamoro, re recontra entusiasmo también. O sea que estoy bien así pero en el momento en que aparezca alguien que me guste, también lo voy a vivir con mucha alegría y sin ningún tipo de reparo.
La entrevista completa con Julieta Ortega está en la edición digital de mayo de revista Pronto, se puede descargar y leer de manera gratuita haciendo click en este link