A fines de los 80, Pablo Ruiz cautivaba con su voz y protagonizaba notas y tapas de revistas. Sin embargo, al entrar en la adolescencia comenzó a recibir imitaciones burlescas y una de las más populares era la que hacia Miguel del Sel. Las burlas se centraban en su identificación sexual y aunque tenía un público que lo seguía también comenzó a recibir agresiones.
“Cuando arranqué ya me discriminaban. Me gritaban cosas por la calle y después del sketch de Miguel del Sel más todavía. Yo empezaba a salir tendría 16 años y en la calle bandas de pibes me gritaban ‘puto, puto’. Era horrible”, contó el cantante en Las noches de Jey. El conductor recordó que el latiguillo burlón que repetía del Sel era “recuerden que tengo novia”.
“Una vez nos juntaron en el living de Susana Giménez. Él estaba en el piso y mi mamá también. Ella soportó el sketch pero después en el corte le dijo de todo. Habíamos aceptado porque era el living de Susana pero qué ganas podés tener de estar en un lugar donde otro te ridiculiza en el horario de más encendido de la tele”, reveló Pablo Ruiz. “No se agarró a piñas pero le dijo que nos había hecho mucho daño y que por causa de lo que él hacía me agredían”.
Conmovido, contó que perdió a su mamá hace ocho años y explicó por qué fue fundamental en su vida. “Ella quedó viuda cuando yo tenía un año y ocho meses. Se aferró a mí para superar la muerte de mi viejo. Mi mamá se puso al hombro a sus cuatro hijos. Salió a limpiar casas, tenía dos almacenes y salió adelante”. Afirmó que cuando él comenzó a cantar su madre fue la primera en apoyarlo porque era una artista frustrada. “A ella se le dio una oportunidad para estar con el trío Los Panchos pero como eran muy pobre mi abuela le dijo que no podía hacerlo que tenía que trabajar”, narró.
Entre las anécdotas risueñas reveló detalles del día en que se quedó a dormir en la casa de Luis Miguel. “Estábamos en la Acapulco Fest, un festival muy importante a principios de los 90'. En esa época la rompía en México y estuvimos bailando en el “Baby’O”, tenía 16 años”, comenzó contando sin alardear. “Yo me había escapado de mi manager, mi discoteca y del hotel, me había ido solo al Baby’O y terminé en la casa de Luis Miguel. Era tarde, yo era chico y me quedé dormido porque estaba medio borrachín”, continuó. Pero la persona que lo despertó sorprendió a todos. “Al rato, cuando terminaron la fiesta, me despierta Paulina (Rubio) y me llevó al hotel.”
Otro dato no tan conocido que brindó es que a los cinco años una otitis hizo que perdiera parte de la audición de su oído derecho. “Escucho solo un sesenta por ciento. Sin embargo no perdí afinación, pero a veces para escuchar mejor tengo que pedir que me hablen en el otro oído”.