Hay instantes de la vida que se transforman en el famoso ‘click’. La cuestión está en aprovechar ese momento para tomar impulso, confiar en uno mismo, y salir a llevarse el mundo por delante con la mejor sonrisa. Vivir, de eso se trata. Este es el caso de Samanta Herdt, la entrerriana de 27 años que, pese a quedar eliminara de Survivor, dejó una huella.
Su historia de vida está marcada por un accidente que fue, justamente, su antes y después. Cuando estuvo en el reality de Telefe habló del tema pero ahora, en una charla con PRONTO, profundizó sobre ese día del que le tuvieron que contar, porque no recuerda nada. Además, cómo era su vida en un pueblito de 700 habitantes, y los famosos que se vieron obnubilados y la quieren conocer.
—¿Qué te llevó a entrar al reality?
—Sinceramente entré por la exposición, no lo voy a negar. Soy artista, me formo desde hace muchos años...he estudiado canto, actuación, danza, comedia musical, modelaje. Amo todo lo que es el rubro artístico, y me gustaría triunfar en eso, principalmente en la música, que ya tengo mi banda. Me estoy lanzando como cantante, y aspiro a llegar muy lejos con el tema música. Así que me pareció una muy buena opción, porque es muy interesante el reality, de los que más me gustan porque amo los desafíos.
—Cuando te quedaste eliminada hablaste de traición de tus compañeros
—Sí, me sentí traicionada, más que nada a lo último, porque yo sentía que era parte del grupo, colaboraba, era muy sociable con todos, que fue lo que se vía, y no sé porque los demás participantes dijeron que yo me aislaba del grupo con Martina. No me parece que sea cierto, si yo tenía buena relación con todos. Siempre me acerqué y colaboré en lo que se necesitaba.
—¿Qué crees que pasó?
—Se ve que vieron otra cosa, y se basaron en que estaba débil, que es verdad, en los últimos días me sentí muy débil, no lo podía ocultar. El cuerpo se me estaba debilitando al no ingerir comida...ya había entrado a la isla con poco peso, y entonces a la primer semana quemé toda la fuente de energía que tenía. Eso me jugó en contra para volver a ser la guerrera como la primer semana, que gané el primer desafío.
—Hablaste de un accidente que te cambió la manera de ver la vida…
—Sí, fue el 31 de diciembre de 2020, ya para la madrugada del 1° de enero, tuve un accidente muy grave en la ruta, en Entre Ríos. Yo estaba en mi pueblo, porque fue a mediados de pandemia, y me volví a mi pueblo, estuvo todo un año viviendo allá de nuevo. Esa noche, íbamos en la ruta con unos amigos, y chocamos contra un paredón, porque era una curva muy pronunciada, el auto tocó el pasto y se fue patinando, chocamos contra un paredón. Del accidente no recuerdo nada.
—¿Ese trauma te acompaña hasta ahora?
—Lo que me acuerdo es que salí a la ruta y después que me desperté en el hospital. Me cerebro bloqueó ese momento...no me acuerdo de nada y por eso no lo veo como un hecho traumático. Pero me contaron que fue muy fuerte, de hecho, estuve 3 meses postrada en cama, y eso me llevó a analizar toda la situación y me di cuenta de que fue un milagro, y estoy feliz de poder estar contándolo ahora, así que esta experiencia fue una oportunidad, un volver a nacer. Hoy no quiero desaprovechar ninguna oportunidad que me dé la vida.
—En el reality te presentaron como modelo, pero me contás que te movés en varias áreas de lo artístico
—Soy modelo y cantante. Sí, en el reality me mostraron como modelo, pero me siento más fuerte en el rubro del canto. Obviamente, amo lo estético, yo trabajo en mi cuerpo y en mi estética, entreno mucho, me cuido mucho, cuido mi cara, hago rutina de esquinquer, y un montón de cosas para la apariencia. Pero la realidad es que me gustaría triunfar como cantante o actriz. Lo pondría en ese orden: canto, modelaje y actuación. Como te dije, hace muchos años me preparo para esto.
—¿Cómo viven tu familia, que vive en un pueblito en el que se deben conocer todos, tu exposición?
—Soy de un pueblito muy chiquito de Entre Ríos, de 700 habitantes, que se llama Aldea Protestante. Mi familia está muy orgullosa, todos felices. Yo hace 11 años que vivo en Buenos Aires, pero vuelvo cada 2 o 3 meses a visitar a mi familia, porque están todos allá, y a mi mamá, en Corrientes, y siempre voy a verlos. Soy muy familiera y los extraño. Amo mi pueblo, que es una colonia alemana y tienen tradiciones alemanas que se mantienen, como las costumbres, las comidas, el idioma… parte de mi familia habla alemán, es un pueblo muy acogedor, de gente muy trabajadora.
—No sé si estás en pareja, ¿pero ya empezó a escribirte algún famoso?
—Sí, estoy en pareja. Ya entré al reality estando de novia, y sigo con la misma persona. Estoy muy feliz y contenta. Es verdad que se me acercaron un par de famosos, me escribieron a raíz de mi exposición, pero no los voy a nombrar, no los voy a quemar (risas). Pero siento que esto pasa y me va a seguir pasando.
—Volviendo a tu pueblo, ¿cómo fue tu infancia allá?
—Tuve una infancia hermosa. Pasé mi infancia y mi adolescencia en Entre Ríos, en el pueblito. Siempre tengo presente que en fondo de mi casa cruzaba un arroyo, había un bosque, entonces toda mi infancia me la pasé trepada a los árboles, en el arroyo, pescando cangrejos, así que fue muy loco el destino que terminé en una isla pescando cangrejos y alimentándome de eso. Creo sinceramente en el destino. Mi infancia fue hermosa, nada para quejarme...ya a los 17 años me vine a buenos aires.
—En tus redes se ve que la gente te adoptó, muchos mensajes cálidos.
—Quiero agradecer a la gente, por el cariño constante. Entre al reality como modelo y pensé que iba a ser prejuzgada por ser modelo, y quise romper con eso. Quise mostrar que no soy solamente una cara bonita, sino que tengo mucho para dar. Con mucha fuerza física y mental. Puedo hacer cualquier cosa que me proponga en la vida. Estoy contenta con lo que logré, pero voy por mucho más.