Actor, comediante y director teatral, Atilio Veronelli es un referente del humor argentino. De su imaginación fabulosa surgieron guiones para Antonio Gasalla, Juana Molina y Moria Casán y como un auténtico multitareas además escribió las letras para los musicales de Susana Giménez, entre ellas la recordada "Detrás de todo solo hay una mujer". La vida le dio uno de esas piñas que dejan cerca del nocaut. En el 2011 uno de sus hijos murió a los 18 años cuando se cayó de una moto. Aunque desde ese momento siente que le "sacaron una parte de adentro", siguió adelante y hoy presenta un nuevo espectáculo.
-¿Qué diferencia a "Es tan dap" de otras propuestas “standaperas”?
-La diferencia fundamental es que yo vengo haciendo monólogos desde principios de los 80. Mucho antes de que empezaran a rodar Seinfeld. Mis maestros fueron Gasalla, Pinti, Perciavalle. Mi narrativa no deviene de la observación de la realidad cotidiana, sino de lo absurdo de la cotidianeidad. Ademas interactúo con la gente ya que el espacio Bolívar es chiquito, y quedamos todos muy cerca. Eso cambia las reglas del juego para el público, que no observa tranquilo desde su butaca: está a dos metros mio. Es más vulnerable y a la vez participativo.
-Te presentás en un espacio cultural en San Telmo, lugar que sale de otros sitios más comerciales ¿Por qué?
-El lugar acaba de ser abierto por unos amigos, y me invitaron a ser parte de la programacion. San Telmo supo ser en algún momento de los sesenta y setenta, un verdadero polo teatral. Están dadas las condiciones para que eso vuelva a ocurrir.
-Con 65 años ya podrías pensar en la jubilación pero te subís a un escenario ¿Necesidad o elección?
-Cumplo 65 en octubre. Iniciaré los trámites de mi jubilación, pero la pregunta parece ser hecha para gente de otro país. Muy poca gente puede vivir en este de su jubilación, porque los haberes están muy por debajo de la canasta básica. Y además... Ya descansaré cuando muera.
-Durante mucho tiempo escribiste las letras de las canciones del programa de Susana Giménez ¿Qué recordás de ese trabajo?
-Susana es una de las personas de este medio que más quiero aunque hace mucho que no la veo. Es uno de los seres más auténticos que conocí en mi vida. Lo del dinosaurio vivo, la retrata perfectamente. No concuerdo con sus opiniones politicas, pero respeto su derecho a expresarse. Es muy, pero muy buena persona en mi opinión, con actitudes de generosidad que pocos conocen y la única diva real de nuestro pais.
-Ahora que vuelve a la televisión, ¿Trabajarías nuevamente con ella?
-Sí, por supuesto que trabajaria con ella. Es una comediante brillante, y conoce el mundo del espectáculo como pocos. Con ella es fácil trabajar y a la vez se aprende.
-Si Susana es la única diva real de nuestro país ¿Qué lugar le das a Moria y Mirtha?
-En mi opinión la única persona parangonable con una diva en la Argentina, es Susana. Su historia con Monzón, la repercusión de su separación con Roviralta, el hecho de ser la reina del rating durante años y años. Exitosa en su profesión y con una vida que ha llenado hojas y hojas de diarios y revistas. Mirtha, fue una actriz mediocre, (declamaba más que actuaba). Ella y su hermana eran como las Xipolitakis de los años cuarenta. Pero si le preguntás a la gente tres películas exitosas de Mirtha no te lo van a poder decir. En realidad a Mirtha la reinventó Romay con los almuerzos donde lo único que ha hecho es importunar invitados abusando de su confianza, interrumpiéndolos y demostrando su supina ignorancia, al punto de citarse a si misma. Y Moria, es cabotaje total
-¿Por qué Moria es cabotaje?
- Si te meten presa en Paraguay por afanarte joyas y andar con cocaína encima, estás más cerca de ser considerada una delincuente que una diva. Yo creo que hay dos candidatas más al título de divas: la Borges, y Nacha (Guevara). Pero el periodismo de espectáculos inventó que estas son nuestras tres divas, cosa con la que claramente, no estoy de acuerdo.
-En marzo convocaste a una sentada en Plaza de Mayo para “mirar fijo la Casa Rosada para que nos vean” ¿Por qué se te ocurrió esa protesta?
-Todo salió del slogan del "no la ven". Mi idea es que este gobierno es el que no ve. No ve la pobreza que genera, la dependencia, el fracaso y la frustración que genera. Esto no es un problema de "caja" como nos quieren hacer creer. Acá se está sometiendo al hambre y a una vida triste y esforzada, a un pueblo, para pagar genuflexos la deuda contraída por un grupo de ladrones de guante blanco encabezados por Macri y Caputo. (Deuda que no se deberia pagar. Con ese dinero no se construyo ni media escuela, ni un cuarto de hospital, ninguna represa... Se lo fumaron los garcas de siempre y lo pagan los jubilados, los pibes, los indigentes... ) por eso fui a sentarme frente a la Casa Rosada. Para que me vieran. El primer día fuimos 30, y después cada vez menos, hasta que me quedé solo. Se ve que lo mio no es la convocatoria política. Pero los policías de la Rosada me trataron muy bien, me dieron conversación y nos sacamos fotos.
-Sin embargo y pese a los muchos que la pasan mal, la propuesta no prendió ¿Por qué?
-La situación es una cosa y mi propuesta otra. Quizás la idea de una protesta pacifista, una sentada, no es lo que se acostumbra hacer acá. Por otro lado, yo no tengo convocatoria política o social. Soy solo un ciudadano algo conocido por ser actor. Pero no tienen por que creer en mí o en mis propuestas. No es grave. Lo grave es que las mayorías crean en las propuestas en las que creen. Por eso estamos como estamos. No por el éxito o el fracaso de mis ideas.
-¿Qué opinás de la gestión de Milei? ¿Y de la actuación de la oposición?
Milei está donde está porque no hay oposición. Solo son cómplices disfrazados de oposición. Milei les dice "ratas" en la cara y no se les mueve un pelo. Y la gente que trajo el (Lemoine, Villarruel, la diputada con patito en cabeza, etc) son absolutamente impresentables. No es un gobierno. Es una administración que entrega al país a quien los coimee con la cifra indicada.
-Durante muchos años trabajaste con Antonio Gasalla ¿Cómo vivís su difícil estado de salud?
-Muy triste. Es el tipo más brillante que conocí y con quien trabajé. Que justamente el quede mentalmente desválido es tremendamente irónico. De alguna manera se convirtió en Mamá Cora. De cualquier manera, si bien todo pasa, sera difícil olvidar su inmenso talento.
-De cómicos como Gasalla al fenómeno de los streamers y las redes, el humor ¿Evolucionó o involucionó?
-En mi opinión, la exigencia bajó junto con la calidad. Así como se venden alimentos "con gusto a "(queso, carne, lo que fuera). Yo creo que el humor de las redes es "cosa simpática con gusto a humor". Recuerdo, por ejemplo, que cuando escribíamos el programa con Antonio (El mundo de Antonio Gasalla, años 88,89,90) solo comenzábamos a escribir el sketch cuando ya habiamos imaginado el final. Pareceria que hoy la cosa es "empecemos y después vemos". O peor, la simplificacion del humor, la unidad mas básica: el chiste. Al igual que en los noventa, cuando se pretende que la gente no piense demasiado (y el humor es una herramienta fantástica para hacer pensar a la gente, si está bien usado) el humor se simplifica y solo queda el chiste, contado o actuado, o la cachada (reirse de alguien por su aspecto, su conducta, algo que le pasó). Humor chiquito y circunstancial, para no pensar.
-En el año 2022 padeciste dos infartos y estuviste grave ¿Cómo está hoy tu salud?
-No es así. En el 2022 tuve una insuficiencia cardíaca leve. Me compensaron y acá sigo dando vueltas. Es lo que los médicos denominan "sobrevida". En 2015 me dieron cuatro o cinco años de vida y ya llevo nueve ... No puedo quejarme.
-En el 2011, tu hijo de 18 años tuvo una muerte tan absurda como inhumana. En una entrevista dijiste “Es como que te chuparon la vida, no hay nada de qué agarrarse, no es que te volaron la casa: "Bueno, construyámosla de vuelta". Esto es como que te sacaron una parte de adentro, es muy raro”. El tiempo ¿mitigó un poco ese dolor?
-El tiempo jamás mitigará el dolor. Y mi memoria se niega a olvidarlo. Es imposible de explicar. Solo lo entiende el que pasó por la experiencia. Pero el lado bueno es que aprendés a discernir que es importante en la vida y que no.
-También dijiste que la vida es “Este juego en el cual nos han metido, por alguna razón. Y hay que jugarlo lo mejor que se puede”. ¿Cómo lo venís jugando?
-Yo juego. Y no me rindo. Insisto, total, como ya dije, para rendirnos y descansar tenemos la eternidad. Yo prefiero seguir generando risas, cuando puedo, y pensando nuevas ideas para alegrar un poco la extraña vida humana.