En medio del escándalo que atraviesan Mauro Icardi y Wanda Nara, este viernes 10, Maxi López llegó a la Argentina proveniente de Italia. El motivo del viaje fue traer a sus hijos: Valentino, Constantino y Benedicto, que estuvieron vacacionando con él. Además, también tiene pensado quedarse unos días para visitar a los suyos.
Un móvil de LAM estuvo en Ezeiza, esperando al exdelantero. Luego del bajar del avión, y los trámites en la Aduana, y demás, 21.50 abandonó el aeropuerto. Lo fue a buscar Wanda en su camioneta, se subieron todos, y manejó López. Como estaban los chicos, se mostró distante, y ella directamente no emitió bocado.
“No me corresponde hablar…no sé nada de lo que está pasando. Ahora voy a hablar con la madre de los chicos. No quiero opinar porque no sé nada de nada. Estoy con mis hijos, vine de vacaciones”, dijo Maxi, que se mostró amable, pero no quiso tirar más leña al fuego
Nara, que siempre se refugió en la prensa para mostrar y filtrar, no emitió palabra. Cerró la puerta vehementemente, y le pegó en el brazo a uno de los noteros. Pidió perdón, pegó el portazo, y se fueron.
Vale remarcar que la relación entre Maxi y Wanda mejoró notablemente cuando solucionaron la parte económica, la deuda que tenía él por alimentos. Él le cedió la mansión de Santa Bárbara, la que ahora tiene una deuda importante, según se filtró.
Además, López vino al país cuando ella conoció lo de su leucemia. Apenas le avisaron, voló desde Inglaterra -donde vivía en ese entonces- para contener a sus hijos y ponerse a disposición de su expareja.