El blanqueo de la relación de Mauro Icardi y la China Suárez generó un gran revuelo. En las redes, volvieron a dividirse las aguas entre aquellos que bancan a la actriz y los que la detesta y agreden. En el medio, muchos se preguntan qué pasará por la cabeza de sus hijos que son chicos y de algún modo, son testigos de todo lo que se dice sobre su mamá.
Justamente el jueves se habló mucho del supuesto enojo de Nicolás Cabré y Benjamín Vicuña por toda esta situación. Se dijo que ambos habrían hecho reclamos a la China por haberse prestado al juego mediático y para colmo, todo se potenció cuando Rufina fue retirada por su papá para irse de vacaciones.
Si bien es cierto que todos los veranos el actor organiza un mes completo con su hija, esta vez se la llevó en un momento especial en el que justo empezó a circular la versión de que él estaría dispuesto a pedir la custodia plena de la menor, al menos hasta que las aguas se calmaran un poco. El equipo de "Desayuno Americano" lo fue a buscar a la salida del teatro para preguntarle por esto, pero Cabré no se la bancó.
"¿De qué estás hablando?", le dijo de mal modo al cronista. Acto seguido, se subió al auto con cara de muy pocos amigos y se fue. La idea de verlo al actor en un enfrentamiento legal de este calibre contra la China Suárez resulta improbable, pues él siempre la defendió de las críticas y los ataques de la prensa. Así mismo, destaca siempre lo buena madre que es la ex y lo orgulloso que está de la educación que le dan en conjunto. Y al parecer, no hay escándalo que pueda hacerlo cambiar de parecer.