Agitadas. Muy agitadas fueron las últimas horas para Wanda Nara, quien llegó sorpresivamente a Villa Carlos Paz y causó un gran revuelo. Anoche martes 21 de enero, la presencia de la mujer del momento en las sierras cordobesas causó sorpresa y tiene un trasfondo que pocos conocen: Wanda vino a reencontrarse con L-Gante.
Resulta que el músico de RKT viajó a Córdoba para hacer un trabajo con el grupo La Konga y tiene previsto quedarse en Carlos Paz por 48 horas: harán un videoclip, grabarán un tema y hasta L-Gante participaría como invitado especial del show de La Konga el jueves a las 22 en el show que la banda dará en el Teatro Luxor.
L-Gante salió en un vuelo privado de Morón a las 18.35 y aterrizó en Córdoba Capital a las 19.55. Para evitar que la gente lo reconociera, le armaron un operativo de salida del aeropuerto por una puerta secundaria y se subió a una camioneta, que lo trasladó hasta la villa turística, adonde llegó un rato antes de las 22. Lucía un conjunto anaranjado llamativo, con su reloj dorado característico colgando en el pecho.
Acto seguido, quien desembarcó en Córdoba fue Wanda Nara, acompañada por una amiga. Lejos de lo que cualquiera pudiera imaginar, no viajó en el jet privado de L-Gante sino que lo hizo por una aerolínea comercial, como lo haría cualquier persona no conocida. Nadie la fue a recoger al aeropuerto y se tomó un taxi a la salida.
Así fue como llegó a Carlos Paz, en un Corsa color verde, con su amiga y las valijas. Se dirigieron directo al hotel Club House, cercano a la aerosilla de la villa serrana, una zona siempre concurrida por turistas. Wanda y su amiga entraron al Club House a las 22.30 y se alojaron en la suite 307, una de las más cómodas del hotel.
A todo esto, L-Gante seguía sin aparecer por el hotel y ahí fue cuando Wanda supo que el músico estaba en el barrio cerrado La Arbolada, en las afueras de Carlos Paz, ensayando con La Konga y armando el plan de trabajo de las próximas horas. ¿Qué hizo Wanda? Dejó las valijas y se fue con su amiga a buscarlo, en el mismo taxi verde que la había traído.
Cuando una empleada del hotel le tocó la puerta de la habitación 307, donde estaba con su amiga, le preguntó si ella se iba a quedar ahí a pasar la noche y Wanda respondió: "Aun no lo vi a Elián, cuando vea a los chicos nos organizaremos adónde dormimos cada uno". La pregunta no fue al azar: Maxi el Brother, el manager de L-Gante, había comunicado en la recepción del hotel que el músico dormiría con él, que compartirían la suite del hotel y no había avisado que llegaría Wanda al lugar.
Acto seguido, Wanda se retiró del hotel y nunca más se la vio. Ella se fue a buscarlo a L-Gante y él, que tenía previsto alojarse en el Hotel Club House, nunca apareció por el hotel. Probablemente se le pudo haber hecho tarde trabajando con La Konga y aunque los pilotos del avión privado que lo trajo a Carlos Paz sí están alojados en el hotel, L-Gante no volvió al lugar para pasar la noche.
La que sí regresó pero para buscar sus valijas fue Wanda. La ex de Mauro Icardi estacionó a las 2.30 de la mañana en la puerta del Club House y no se bajó del auto. Su amiga subió, retiró las valijas de la mediática y se fue, sin pagar ni explicar por qué abandonaban el lugar a esa hora de la madrugada. Una novela que sigue sumando capítulos y que por momentos desconcierta a propios y extraños. Así fueron las agitadas 12 horas de Wanda en Carlos Paz.