Después de haber denunciado a su tío Ulises Jaitt por violencia familiar, Valentino Yospe, el hijo de Natacha Jaitt, decidió hablar públicamente sobre el difícil proceso que atraviesa. El joven presentó la denuncia luego de relatar episodios de maltrato físico y psicológico que, según su testimonio, padeció durante varios años. Tras la exposición del caso, la Justicia habría dictado medidas de protección y el tema se maneja bajo reserva por la sensibilidad del vínculo familiar: pusieron una perimetral, según dio a conocer Ángel De Brito.
En diálogo con LAM, el programa de América, Valentino se mostró conmovido y reflexivo al repasar su historia. "Perdí un montón de años de mi vida, de infancia, algo que hoy en día me está costando superar. Soy muy inmaduro en un montón de aspectos, fruto de que yo de chico no fui un niño, sino un pibe que trataba de atravesar un montón de problemas familiares con su tío violento", expresó con crudeza.
Luego, el joven profundizó en sus sentimientos: "Me agarró miedo porque no sé qué va a hacer este tipo una vez que entre a un programa", dijo, visiblemente afectado. También confesó que ver al hermano de su madre en televisión le genera una mezcla de emociones: "Ver a alguien en la cámara, que es tu familiar al cual amaste por muchos años y que terminó caga… a trompadas, son un montón de emociones encontradas".
"Si lo llegan a llamar, sé que es capaz de ir porque le gusta aparecer", agregó el joven. Según precisó De Brito, "Ulises no puede hablar. El mismo día que hicimos la nota con Valentino, la producción lo llamó para que dé su explicación y no puede hacer declaraciones públicas porque hay un tema judicial en el medio".
Mientras la causa avanza en la Justicia, Valentino busca dejar atrás el pasado y construir una vida lejos del dolor que marcó su infancia.