Luego de un 2024 muy difícil en el que debió atravesar no sólo problemas económicos sino también un cuadro de depresión, Benito Fernández se refugió en su familia. El amor de Lucas y Marina, sus hijos y el apoyo incondicional de sus amigos, lo ayudaron a salir adelante.
Pero sin dudas su mayor debilidad es su nieto Fermín. El hijo de Marina tiene poco más de dos años y se ha convertido en la luz de los ojos del diseñador que de vez en cuando comparte en sus redes, parte de los momentos que comparten juntos.
Este domingo por ejemplo, tuvo una situación muy simpática y no dudó en mostrarla. "Creo que Fermín no va a segur mis pasos", escribió junto a una foto de su nieto arriba de un tractor. Según parece, es un apasionado por los vehículos y no demuestra interés alguno por la moda, al menos por ahora.
Bromas al margen, para Benito resulta un bálsamo poder disfrutarlo y verlo crecer, pues lo llena de una energía especial que sin dudas, le hizo muy bien para recuperarse.