Este fin de semana, Daniela Celis vivió una experiencia inédita: viajó por primera vez sin sus hijas gemelas, Laia y Aimé, para cumplir con compromisos laborales en San Luis. A través de sus historias de Instagram, la exparticipante de Gran Hermano relató cómo vivió estos casi dos días lejos de sus bebés, mostrando tanto los momentos de relax como la nostalgia que sintió durante su ausencia.
"Hoy les puedo presentar un contenido de una mujer siendo madre estando sola por primera vez. Tenemos un desfile ahora en San Luis. Llegamos, almorzamos y ahora es momento de descansar un poco", comentó Daniela el sábado, visiblemente emocionada por tener tiempo para ella.
Durante su estadía, Daniela también compartió algunos momentos de autocuidado que no había podido disfrutar desde hace tiempo. "Amigos me di una ducha de treinta minutos, el agua y yo y nadie más. No llantos de fondo, no gritos de fondo. Qué placer", expresó, destacando lo que para ella fue un lujo: tener tiempo para relajarse sin las responsabilidades de ser madre.
Aunque disfrutó de un descanso que le permitió incluso tomarse una siesta, Daniela no pudo evitar sentirse algo extraña al estar lejos de sus hijas. "Es la última hora acá y adelante contenido. Ya me había olvidado lo que es hacer siesta, me puse el pijama a las cinco de la tarde, hace cuanto no hago una siesta?", comentó con una mezcla de diversión y nostalgia.
La situación también la llevó a reflexionar sobre su nueva rutina. "No puedo creer esto. Me estoy haciendo un skincare, no puedo creer que estoy haciendo esto. Siento que estoy pelotud..., qué placer, por favor. Ya no sé ni cómo se hace esto y hasta me voy a maquillar".
Sin embargo, en su tono sincero, también admitió que la tranquilidad no duró mucho. "Me parece que me malacostumbré, no salió tan bien como creí. Voy a tener que poner la almohadita, como para abrazar a mis bebés y dormir enredada", confesó, mostrando cómo extrañaba profundamente a sus hijas.
Este domingo, al despertar en San Luis, Daniela compartió su desvelo por Laia y Aimé, a pesar de lo hermoso del lugar en el que se encontraba. "Buen día, San Luis. Amanecí sin mis bebas, pero con estas sierras. Todo muy hermoso por acá, pero ya extraño mucho", escribió, dejando en claro lo difícil que fue estar lejos de sus hijas, aunque el paisaje fuera impresionante.