Luego del difícil momento de salud que atravesó en los últimos meses de 2024, se confirmó que María Valenzuela regresará a la actuación en el teatro, acompañada por Rodolfo Ranni, con quien compartió diversos elencos y novelas en televisión. Una gran noticia para su entorno familiar y para el público que la sigue desde hace mucho tiempo.
En noviembre pasado, la actriz permaneció varias semanas internada en un centro especializado de Ituizangó debido a un fuerte cuadro de estrés y una profunda angustia. La decisión fue propia y su estado de salud preocupó a todos. En enero, a través de un intercambio de mensajes con distintos periodistas, dio a conocer que estaba mejor pero que debía seguir con el tratamiento indicado por los médicos. La actriz hace años que lucha con altibajos con probemas de depresión.
Un mes después de la última aparición pública, Valenzuela conversó con La Nación y confirmó que actuará en La noche de la basura junto a Ranni en el Teatro Metropolitan. La obra tendrá su estreno a mediados del mes de abril y las funciones serán los martes a las 20 y los viernes a las 20.15.
“Tenía muchas ganas de volver a la actividad, es muy lindo poder trabajar y despejar la cabeza. Estoy muy contenta de regresar con esta obra y sobre todo de hacerla con El Tano”, dijo la actriz en diálogo con La Nación.
“Se trató de un pico de estrés. De todas maneras, yo pensaba reincorporarme después de la temporada veraniega para salir con la obra de gira, pero finalmente terminarán en Mar del Plata este fin de semana”, expresó acerca de los planes que tenía con Tom, Dick & Harry, obra de la que fue parte desde enero de 2023 pero que debido al problema de salud, fue reemplazada por Claribel Medina.
Sinopsis
La noche de la basura es una pieza del recordado actor Beto Gianola (padre del comediante Fabián Gianola), que originalmente se llamó El carro de la basura y fue estrenada en 1981 por Carlos Carella y Miriam De Urquijo. Aborda la crisis de un matrimonio con 27 años de convivencia, que siempre vivió a través de los ojos de su único hijo, y transcurre justo en las horas posteriores al casamiento del mismo. Al momento de su estreno, la obra impactó al público y a la crítica por su crudeza, su planteo tan directo y también por su final inesperado.
“Lo que más me interesó de la pieza fue lo del nido vacío, cuando el padre y la madre se quedan solos y empiezan a pasarse facturas, a decirse de todo. Evidentemente, ellos seguían juntos por su hijo, y al marcharse él empieza a aflorar un montón de cuestiones amontonadas, que nunca habían sido dichas”, sostuvo María en la entrevista con el medio.