La historia de amor de Rocío Guirao Díaz y el empresario de los embutidos comenzó a fines de 2007 cuando Nicolás Paladini la contactó por Facebook. Un año después, con la modelo embarazada de Aitana (nació el 23 de junio de 2009), dieron el sí formalmente pero no hicieron una gran fiesta porque la modelo prefería postergarla para otro momento en el que la pudiera disfrutar sin panza. Ese momento llegó el 26 de febrero de 2012, ya con otro hijo en la familia, Indio, que nació el 2 de febrero de 2011. Después llegaría Roma el 3 de agosto del 2016.
Enamoradísima, la modelo decidió dejar Buenos Aires para instalarse en Rosario. Pero en el 2021 decidieron instalarse en Miami. El cambio no sería fácil para los chicos. La modelo lo sabía por eso explicó en sus redes que se adaptarían “Con tiempo, amor y paciencia, como todos los chicos que emigran”. Además Laura, su mamá y abuela de los chicos, también se sumó a la mudanza.
También en redes, la modelo había contado cómo era ser mamá de tres.“Me hacen muchas preguntas sobre la crianza de mis hijos. Si somos muy pegotes, nos encanta besuquearnos, abrazarnos y estar juntitos, así es como me criaron, y así es como crío. No conozco otra manera que no sea a través del amor. Y como nos pasa a tod@s también extraño mis momentos en soledad pero entiendo que esto es parte de una etapa que hay que transitar, nada es para siempre”.
Ya definitivamente instalados, Aitana cumplió 15 años y heredó la misma belleza que su mamá. Indio acaba de cumplir 14 y es un adolescente muy fachero. Roma con ocho años es la más mimada de la familia. Hace unos días, la modelo subió fotos de un idílico paseo familiar en yate y lo llamó "creando memorias".
"Ahora, con dos adolescentes y Roma, que los copia en todo, disfruto de ellos desde otra perspectiva. Hace poco viajamos a España y fue el primer viaje en el que sentí que estaba con tres adultos. Todo fluyó”, contó en La Nación sobre esta etapa que transita. También contó que ella y su pareja buscan espacios para estar solos: “Aitana se queda cuidando a sus hermanos y vamos a comer afuera solos o con amigos, una vez a la semana”.