De un momento a otro, sin previo aviso, la vida de Flor Torrente dio un vuelco. Es que hace unos días se confirmó que su padre, Ruben Torrente falleció. Para colmo, él no padecía ninguna enfermedad ni nada por el estilo, simplemente fue a jugar al fútbol y allí se descompensó. Ahora, ella decidió romper el silencio y no logró contener las lágrimas.
Es que la actriz y modelo no sólo se encuentra transitando el duelo por esta pérdida, sino que incluso también intenta contener a su familia. Sobre todo a su hermano menor, quien estaba con su padre en el momento del hecho.
De este modo, en diálogo con Puro Show y con lágrimas en los ojos, Flor Torrente intentó poner en palabras cómo se siente: “Qué sé yo (cómo estoy...). Es eterno esto, no tiene un principio o un fin. Son procesos y una los va transitando cómo puede de la mejor manera que puede y el laburo a veces ayuda porque hace que por momentos podamos abstraernos de nuestra realidad y distraernos un ratito pero bueno, es mi papá, y es algo que está ahí constante y latente”.
Ante esto, contó cómo la familia se unió para tratar de superar esto juntos: "Tenemos un vínculo súper. Es la mamá de mi hermano, la conozco hace muchísimos años y nos queremos mucho... Somos una familia y estamos ahí, unidos por mi hermanito que es lo más importante y porque todos somos adultos, podemos procesarlo de otras maneras pero él es un niño y hay que acompañarlo”.
Teniendo en cuenta que la noticia impactó a todos, el notero le consultó por Araceli González: "¿Tu vieja cómo anda?". Fue así como Flor Torrente reconoció que ella también se vio afectada: "Y mi vieja ahí anda, qué sé yo, como todos... O sea, a todos nos pega por un lugar diferente, era mi papá, y yo soy su hija... Es inevitable el cariño y transitarlo todos juntos de la mejor manera posible".
De esta manera, Flor Torrente destacó la necesidad de distraerse con otras cuestiones para pode sobre llevar el dolor de la manera menos dolorosa posible: “Creo que el arte tiene eso. Es el poder plasmar cosas que nos pasan en la vida y transformarlas. Por lo menos un ratito”. Y cerró con una reflexión sobre la muerte de su padre: “Es así, a veces pasan estas cosas que no tienen explicaciones y hay que aprender a ver cómo transitamos la vida sin él”.