Candelaria Sorini fue una de las revelaciones más destacadas de la tercera edición de Masterchef. Proveniente de Berazategui y con una historia de vida poco habitual en los concursos televisivos, esta joven de 26 años que se desempeñaba como agente del Servicio Penitenciario Bonaerense se ganó rápidamente el cariño del público. Su simpatía, su humildad y su capacidad en la cocina la convirtieron en una de las participantes más recordadas del ciclo.
Su debut en el reality fue soñado: conquistó al jurado integrado por Germán Martitegui, Damián Betular y Donato De Santis con un budín de zanahoria acompañado por gajos de naranja, cubos de mango y una ganache de chocolate que le valieron la primera medalla de oro del certamen. Aquel plato no solo la salvó de la primera eliminación, sino que también la posicionó como una de las favoritas.
Sin embargo, su paso por el programa terminó en junio de 2023, cuando fue eliminada tras presentar unos ñoquis que, según Betular, "estaban duros". Martitegui lamentó que haya sido “el plato menos Candelaria de los últimos dos meses”.
A pesar de su salida anticipada, Sorini logró capitalizar la exposición mediática. Su historia personal, que incluía ser madre joven, trabajar en el ámbito penitenciario y combinar todo eso con su pasión por la cocina, cautivó a la audiencia. Además, su belleza y carisma natural despertaron miles de seguidores en las redes sociales. Hoy, su cuenta de Instagram supera los 150 mil seguidores, una comunidad con la que mantiene un contacto cercano, compartiendo momentos de su vida, campañas publicitarias y reflexiones íntimas.
Fue justamente ese vínculo con su público el que la impulsó a diversificar sus ingresos. En un giro poco común pero cada vez más frecuente entre figuras mediáticas, Candelaria decidió abrirse un perfil en una plataforma para adultos, donde comercializa contenido erótico con la consigna: “Vení a charlar conmigo y descubrí mi lado más caliente”. Actualmente ofrece una promoción de suscripción por cinco dólares mensuales, una cifra sensiblemente menor a los 25 dólares que solía cobrar, además de un paquete de tres meses a 37,50 dólares.
El paso de la televisión al contenido exclusivo en plataformas digitales no fue inmediato, pero sí estratégico. Candelaria también trabaja con marcas locales de spa, cafés, bares y salones de belleza, aprovechando su imagen y su llegada en redes sociales para realizar publicidades. En su perfil pueden verse posteos promocionando emprendimientos de Berazategui, City Bell y la Ciudad de Buenos Aires.
Fuera de lo laboral, Candelaria se muestra muy presente en la vida de su hija, quien cumplió cinco años en enero. En su Instagram compartió imágenes de la fiesta de cumpleaños con temática de Barbie, junto a un mensaje cargado de ternura: “Hoy cumples un día más siendo la persona que más amo”.
El pasado 24 de abril, la ex Masterchef celebró su propio cumpleaños con una cena en Puerto Madero y un emotivo mensaje que refleja su proceso de transformación personal: “Me estoy dejando llevar por mis sentimientos, que es lo más genuino que tengo. Feliz vida para mí”.