A 14 años del escándalo mediático que llevó a la separación de Carmen Barbieri y Santiago Bal, tras la infidelidad de él con Ayelén Paleo, la mediática volvió a estar en el centro de la escena por la detención de su madre. La señora está acusada de integrar una red de trata de personas, y la conductora habló del tema. Barbieri no dudó en responder con ironía, recordando el enfrentamiento de hace casi dos décadas y el rol que tuvieron en él tanto la joven como su madre.
Consultada por SQP, Carmen Barbieri no dudó en dar su opinión respecto a la difícil situación que vive hoy Paleo con su madre, después de haber estado alejada de los medios durante años. "Que lo arregle en la Justicia y haya justicia. Para mí ya hubo justicia divina", lanzó picante desde un inicio.
"Veo a la mamá de esta señorita, con esposas y policía, y pienso que Paleo debe estar sufriendo mucho. Debe estar sufriendo igual que yo cuando ella y su hermano amenazaban a mi mamá por teléfono", recordó duramente sobre su separación con Bal. Además, fiel a su estilo, no se guardó nada y lanzó una frase contundente: "Menos mal que no está vivo Santiago, sino se volvería a morir por el disgusto que le daría esta chica".
En cuanto a la aparición de la joven en el "Bailando", después de estallado el escándalo de su relación con Santiago Bal, Carmen señaló que Paleo "quería ser famosa y ahora lo es, pero por otra cosa". Y sumó que "la fama es brava en general, hay que tener cuidado".
La conductora también habló sobre Elizabeth Rodrigo, la madre de Ayelén, y contó que la conoce "porque se la pasaba en el camarín de Santiago, pensé que venía a cuidar a la nena, que tenía 19 años, pero después se hizo muy amiga de él". Además, habló sobre el plano profesional de la acusada: "La madre tenía estudios para preparar a modelos, donde tomaban audiciones y fotos. Imaginé que era así, pero parece que era otra cosa".
Respecto a la causa que mantiene detenida a Rodrigo, deseó "que no sea cierto y la liberen pronto", pero no dudó en disparar nuevamente contra Paleo: "Le tengo mucha lástima y pena a Ayelén”. Con la ironía y picantéz que la caracteriza, cerró con una reconocida frase: "Siéntate en la puerta de tu casa y verás pasar el cadáver de tu enemigo".