Después de un período más activo e intenso, el cielo ofrece en junio de este 2025 unas energías más sutiles y profundas, gracias a la fuerte presencia de los signos de tierra y agua que ahora nos invitan a fortalecer nuestras bases y nutrir lo esencial, tanto en las relaciones como en los proyectos de vida.
El planeta de la suerte cambia de signo
El tránsito más importante de junio 2025 para la astrología es la entrada de Júpiter en Cáncer, el día 9 de junio. Permanecerá en este signo hasta el 30 de junio de 2026. Conocido como el planeta benéfico mayor, Júpiter determina quién tendrá buena suerte durante el próximo año. Júpiter es un planeta que expande, aumenta y hace crecer.
Recordamos que Júpiter es el planeta más grande del sistema solar y debido a ello, se le asignó el nombre del dios de la mitología romana que gobernaba a los demás, el más poderoso y padre de Marte, Venus, Vulcano, Minerva, Apolo y Diana.
Hasta mediados de 2025, estuvimos bajo el ciclo de Júpiter en Géminis, que favoreció a los geminianos y a aquellos con Géminis en el ascendente, especialmente a los que trabajan – en cualquier nivel – con comunicación, educación o presencia pública. Ahora comienza el año de realización para los cancerianos y las personas que tienen este signo en puntos específicos de su carta astral, como el ascendente, la Luna o incluso Júpiter.
Todos los signos pueden notar la influencia de Júpiter en Cáncer. Va a traer mayor sensibilidad al entorno cercano y a las personas más vulnerables, aumenta la capacidad de expandir los sentimientos de cuidado y genera impulsos más fuertes de protección. La seguridad emocional, un término que parece difícil de entender, es una buena forma de explicar el sentimiento predominante. Trabajamos para que los que amamos estén seguros, les ofrecemos seguridad, estabilidad. Es un excelente momento para fortalecer los lazos familiares y buscar crecimiento a través de una conexión más profunda con el pasado.
En lo profesional, se ven beneficiados los proyectos que involucren cuidado, nutrición y bienestar.
El apoyo de los planetas
Luego del día 6 de junio, Venus ingresa en Tauro, su signo de domicilio, acentuando el deseo de estabilidad en las relaciones. Venus en Tauro trae una energía de amor constante y duradero, que busca comodidad y placer en las cosas simples de la vida. Como Venus puede expresarse ampliamente en su signo, aumenta la búsqueda de lazos más profundos y sólidos y no solo en el amor, sino también en las amistades y en los vínculos financieros.
La otra cara de Venus en Tauro es su despertar de la creatividad, siempre que ella se plasme en cosas concretas como el arte, la música e incluso la cocina.
A continuación, el 8 de junio, Mercurio ingresa en Cáncer, y la comunicación adquiere un tono más emocional.
El planeta de las comunicaciones se matiza con una energía más empática, que ve con más claridad el impacto de las palabras en las emociones de los demás. Hasta fin de junio el ambiente favorece las conversaciones profundas, para hablar, ser comprendido y atender a las necesidades emocionales de quienes nos rodean. Es un buen momento para revisar recuerdos y sanar heridas antiguas a través del diálogo. También, la memoria afectiva se coloca en un lugar protagónico, con flashes y recuerdos, referencias y conversaciones sobre el pasado personal.
A partir del 17 de junio, Marte ingresa en Virgo, con su acción enfocada, práctica y atenta a los detalles. Este tránsito favorece el trabajo arduo y la dedicación, especialmente en proyectos que requieren organización y método, además de tocar cuestiones relacionadas con la salud y el bienestar.
El Solsticio de Invierno ocurre junto con la entrada del Sol en Cáncer, el 20 de junio, abriendo una temporada más introspectiva, que invita a mirar hacia adentro, cuidar de nuestras emociones y fortalecer nuestras relaciones con el hogar y la familia. La Luna Nueva en Cáncer, en el día 25, muestra en qué punto es necesario plantar nuevas semillas para que nuevos proyectos puedan florecer en el futuro.
Al final del mes, el 26 de junio, Mercurio ingresa en Leo, trayendo una energía más expresiva y audaz para la comunicación, que comenzará a manifestarse a partir de julio.