La vida de Britney Spears siempre está rodeada de escándalos. Aunque la cantante pop intenta evitarlos, siempre termina pasándole algo que la deja en el ojo de la tormenta. Unos meses atrás, el mundo entero se manifestó con el "Free Britney", para que la artista pueda liberarse económicamente de su padre, quien durante más de 13 años manejó su economía.
Ahora, en Nosotros por la mañana, ciclo que conduce el Pollo Álvarez por Eltrece, dieron una sorpresiva información sobre el inesperado inconveniente que sufrió la cantante, minutos antes de su boda con su personal trainer.
"Britney comenzó hace unos meses esta relación con Sam Asghari, actor y personal trainer iraní, con quien esperaba un hijo, que lamentablemente perdió a principios de este año", comenzó diciendo un panelista.
Y agregó: "Habían armado en su casa de California, una ceremonia íntima de casamiento. Se habían comprometido hace unos meses y dijeron que iban a hacer una ceremonia. Britney contó incluso que la hija de Versace le iba a hacer el vestido. Se esperaba una ceremonia para 100 invitados solamente, muy íntima, para Britney y Sam".
¿Quién fue el ex de la artista que se presentó en su boda de imprevisto? Jason Alexander, el primer marido de la princesa del pop. "Estuvieron casados 55 horas. Se casaron en Las Vegas y lo anularon al toque. Cuando se entera el actor, no creo que sea por celos porque nunca hizo nada para regresar con ella, decide entrar en la ceremonia y lo muestra a través de una transmisión en Vivo de Instagram. No sé para qué", continúo explicando el periodista.
En dicho el video se puede ver al actor recorriendo el lugar, buscando a Britney, habitación por habitación. "Entra al salón y nadie entendía nada. En los comentarios la gente preguntaba dónde está la seguridad. En una parte del video se lo escucha decir 'mi primera y única esposa'", expresó otra panelista.
Finalizando la transmisión en vivo de Instagram, aparece el personal de seguridad y lo escoltan fuera del salón, antes de que empiece la ceremonia. "Fue lamentable, para mí no estaba en sus cabales", concluyó el Pollo Álvarez.