Pese a su afán de querer transitar su enfermedad sumergida en el perfil bajo y destinando su energía a mejorar su estado de salud, Kate Middleton vivió una semana agitada. Es que comenzó con un paseo junto al príncipe Williams, en lo que parecían ser tiempos de paz. Sin embargo, todo dio un vuelco ante una foto fake que se viralizó.
La semana comenzó en paz para la princesa de Gales, ya que decidió desconectarse y pasar un momento relajado junto al príncipe Williams. Es por eso que visitaron la localidad de Holt, situada en el condado de Norfolk, en donde se encuentra la casa que Isabel II les regaló en su casamiento.
Pero no sólo estuvieron allí, sino que Kate Middleton decidió tomar un paseo y visitó Bakers & Larners, un reconocido e histórico local de la zona. El prestigio de este sitio es enorme, ya que fue fundado en 1770 y sigue en pie por la gran calidad de los productos, que van desde decoración, jardinería e incluso artesanías.
Sin embargo, aunque la variedad era amplia, la princesa y el príncipe Williams habrían optado por comprar chocolates, ya que allí se venden unos exclusivos que parecen ser los favoritos de la pareja. Ante esta situación, desde Eastern Daily Press, dialogaron con una persona vinculada a la tienda, por lo que confirmó las versiones: "Siempre nos sentimos honrados de recibir la visita de la familia real y el martes no fue diferente; esperamos volver a ver a Sus Altezas Reales en Holt pronto".
Pese a esto, la paz se cortó de forma veloz, ya que se comenzó a viralizar una foto de cómo se encontraría actualmente la princesa de Gales. La sorpresa era que por primera vez se mostraba con un turbante en la cabeza, ya que éste tapaba los efectos secundarios de la quimioterapia para tratar su cáncer.
Sin embargo, el hecho de que la corona británica no haya publicado la foto es lo que levantó sospechas de que se trataba de una foto fake. Por lo que finalmente un estudio terminó revelando que la foto estaba trucada y no era Kate Middleton, sino que había sido alterada con inteligencia artificial.
"Un examen realizado con la aplicación de inteligencia artificial IVERES, un proyecto codirigido por RTVE y la Universidad Autónoma de Barcelona para detectar desinformación e imágenes manipulada, dice que hay un 99,98 % de probabilidad de que la imagen haya sido alterada digitalmente. Del mismo modo, otro análisis con la herramienta Fake Image Detector apunta a que probablemente se trata de una imagen manipulada o creada mediante ordenador", se informó desde el medio EFE.