El fin de semana pasado, Taylor Swift hizo una histórica seguidilla de conciertos en el estadio Wembley de Londres como parte de su gira internacional The Eras Tour. Entre la audiencia estaba Paul McCartney, quien fue a disfrutar del show junto con su hija.
Recién llegado, el ex integrante de los Beatles intercambió "pulseras de la amistad" con varias fanáticas, tal como las swifties acostumbran a hacer en los conciertos de la exitosa artista estadounidense. A continuación, el ídolo del rock disfrutó del show desde la carpa VIP, ubicada en el campo delantero.
Sin embargo, en medio del espectáculo, Paul y su hija se mezclaron con la gente para bailar "But Daddy I Love Him" junto con varias fans. Este inolvidable momento fue captado por varios de los asistentes y no tardó en hacerse viral en redes sociales.
McCartney no fue el único famoso que estuvo presente en los históricos shows de Taylor Swift en Londres. También asistieron Jon Bon Jovi, Cate Blanchett, Gracie Abrams y hasta Tom Cruise. Travis Kelce, el novio de la artista y jugador de los Kansas City Chiefs, hizo una aparición en el escenario como un bailarín más para celebrar lo significativo que eran estos espectáculos para su pareja.
Y como si no fuesen suficientes sorpresas para un fin de semana, Hayley Williams de Paramore y Gracie Abrams también se subieron al escenario con Taylor Swift para cantar una canción acústica cada una en el piano.
Fue tal el significado de los shows de Swift en Wembley que asistieron miembros de la familia real tanto británica como española, que no podían perderse el inolvidable evento.