En su novela "Los reyes de la casa", Delphin De Vigan, la genial escritora francesa, narra una sobrecogedora historia sobre la sobreexposición en redes y la falsa felicidad que muchas veces crea. No sabemos si París Jackson lo leyó, pero si lo hiciera seguramente se sintió identificada. Ya desde su nacimiento, la segunda hija de Michael Jackson creció rodeada de cámaras y una feroz exposición mediática, tanto que en sus apariciones públicas, el artista escondía a sus hijos tras unas máscaras con el fin de mantenerlos alejados de las miradas.
Cuando falleció su papá, Paris tenía 11 años y el seguimiento sobre su vida no se detuvo. “Cuando ves a un niño crecer ante el ojo público, no lo tomas en serio y la gente no se da cuenta, al criticarme, de que soy un ser humano.”, reflexionó hace algunos años. Todo esta presión tuvo un costo en su vida. A los trece años comenzó su adicción a las drogas y al alcohol. Hoy con 26 años compartió un conmovedor video donde celebra sus cinco años sobria y limpia de drogas.
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"Hola, soy PK (Paris Katherine), alcohólica y adicta a la heroína", comienza su mensaje con una sinceridad que sigue con un "Hoy se cumplen 5 años de estar limpia y sobria de todas las drogas y el alcohol. Decir que estoy agradecida sería un eufemismo. La gratitud apenas rasca la superficie. Es porque estoy sobria que hoy puedo sonreír. Tengo que hacer música. Tengo la oportunidad de experimentar la alegría de amar a mis perros y gatos". La publicación, rápidamente acumuló miles de “me gusta” , entre ellos el de Cara Delevingne, su amiga y con la que se la vinculó sentimentalmente.
Como si las palabras no alcanzaran acompañó su declaración con un video en el que mostró imágenes de su pasado, luchando contra las adicciones. En uno de esos momentos se la observa bebiendo alcohol y bajo los efectos de las drogas. Sin embargo su mensaje tiene un efecto esperanzando porque a lo largo del video se ve su recuperación hasta transformarse en una joven saludable y sonriente. "Puedo sentir el corazón roto en toda su gloria. Tengo que llorar. Tengo que reírme. Tengo que bailar. Tengo que confiar. Siento el sol en mi piel y está caliente".
Para terminar, París Jackson reflexionó sobre la importancia de su sobriedad y de cómo haberse alejado de sus adicciones le permite apreciar y disfrutar de la vida. "Descubrí que la vida sigue sucediendo, independientemente de si estoy sobria o no, pero hoy tengo que aparecer para ello. Aquí hay una pequeña foto de lo que ha sido posible debido a mi sobriedad, y Dios mío, no puedo creer que casi me lo perdí todo. Gracias".
No es la primera vez que París comparte en público los problemas que debió afrontar. En el año 2017 en una entrevista para la revista Rolling Stone relató que fue violada a los 14 años por un desconocido y tuvo tres intentos de suicidio frustrados. Hace cuatro años en una charla con Willow Smith, hija del actor Will Smith, reveló que por los comentarios maliciosos y el ciberbullying que recibía a diario sufrió alucinaciones auditivas, paranoia y debió hacer terapia luego de que le diagnosticaron trastorno de estrés post traumático. Hoy París celebra su sobriedad y narra su experiencia con la esperanza de ayudar a otros para recuperar su salud mental.