Desde que el legendario actor Gene Hackman y su mujer, la pianista Betsy Arakawa, fueron encontrados muertos el 27 de febrero en su casa en Santa Fe, en Nuevo México, las noticias en torno a las circunstancias de sus fallecimientos pasaron del misterio a la tristeza. Si bien se pudo descubrir la forma en que murió la pareja, cada vez que trasciende algún detalle de cómo fueron sus últimos días se suman datos conmovedores e impactantes.
El cuerpo de Betsy Arakawa fue descubierto en el baño de la casa. En un principio, hubo sospechas de una posible sobredosis, pero el análisis toxicológico descartó esta hipótesis y confirmó que el hantavirus, una enfermedad poco frecuente que se propaga a través de los excrementos y la orina de los roedores, fue la causa de su muerte. En las últimas horas se divulgó un informe oficial que mostró que la propiedad donde vivía el matrimonio estaba infestada de ratas.
Según informó el sitio TMZ, Una semana después de que se descubrieran los cuerpos de Hackman y su esposa, el Departamento de Salud Pública de Nuevo México realizó una evaluación sanitaria de la propiedad. El informe fnal señala que se encontraron roedores muertos y nidos en “ocho dependencias” de la propiedad del actor. Además se identificaron excrementos de ratas en tres garajes, dos casas de huéspedes y tres garages de la propiedad. En dos vehículos de Hackman aparecieron indicios de roedores, e incluso se encontraron trampas en los edificios, lo que sugiere que se trataba de un problema constante en la vida del matrimonio. Sin embargo, la residencia principal se consideró de “bajo riesgo”, ya ue no se hallaron signos de roedores en su interior.
Un dato conmovedor que trascendió es que cuando los agentes de la policía entraron a la vivienda encontraron a Nikita, uno de los tres perros que convivía con la pareja, sentado y sereno junto al cuerpo de Arakawa. Los agentes comentaron que lejos de gruñirles se mostró "bastante amigable".
También fue llamativa la actitud del otro perro, Bear. Los agentes describieron que lo encontraron “corriendo” y ladrando a lo lejos. Cuando caminaron hacia donde provenían los ladridos, encontraron en el vestíbulo el cuerpo sin vida de Hackman. Zinnia el tercer pastor alemán que la pareja tenía como mascota se recuperaba de una intervención estaba sin vida.