La primera semana del regreso tan esperado de La Academia a la televisión mexicana no pasó desapercibida. Una de las revelaciones más sorprendentes fue la confesión de Brandon Valenzuela, participante del programa, durante una sesión de terapia psicológica que fue televisada.
El joven cantante abrió su corazón y compartió un pasado oscuro que marcó profundamente su vida antes de dedicarse por completo a la música. "Vi muchas cosas que no quería ver, hice cosas que no quería hacer. Probé cosas que no quería probar. Me sentía como un delincuente cuando solo quería cumplir mi sueño de ser cantante. Yo soy una buena persona que solo quiere cumplir sus sueños y sacar adelante a su familia", confesó.
"Pero también empecé a sentir mucho poder y que se me hacían más fácil las cosas. Pero con miedo. No me sentía a gusto, no podía salir a comer o salir a pasear. Tampoco tenía tiempo. Tenía que estar con miedo a que si alguien me iba a hacer algo. Tenía miedo que me llevaran", agregó Valenzuela sin dar más detalles.
El participante también describió el miedo que caracterizaba el entorno en el que se encontraba y relató una lamentable anécdota: "Una vez me golpearon, aunque no hice nada para merecerlo. Fue un golpe en la costilla que me dolió muchísimo. Siempre trataba de cuidarme y evitar problemas, especialmente cuando esa persona estaba cerca. Por eso me daba miedo salir solo y casi nunca salía. Me la pasaba encerrado y no vivía en una casa, sino en la bodega de un bar”, compartió Brandon.