Este domingo, Wanda Nara enfrentó una de las entrevistas más reveladoras de su carrera junto a Susana Giménez. La empresaria y conductora no solo se sinceró sobre su conflictiva separación de Mauro Icardi y las tensiones que atraviesa, sino que también dejó un mensaje contundente a través de su look.
Para esta ocasión eligió un traje negro impecable que hablaba más allá de las palabras. En medio de denuncias por amenazas, desalojo y enfrentamientos mediáticos. La conductora optó por un atuendo que reflejaba poder y resiliencia.
El traje negro, con su chaqueta de corte clásico y pantalón sastre, no fue una simple elección de moda. Históricamente, los trajes han sido un símbolo de empoderamiento femenino.
Desde los años 30, cuando actrices como Marlene Dietrich comenzaron a usar prendas tradicionalmente asociadas a los hombres, hasta el "power suit" popularizado en los años 80, las mujeres han adoptado esta pieza como una declaración de independencia y autoridad. Para Wanda Nara, este look significó fuerza en un momento de vulnerabilidad, mostrando que está lista para afrontar las adversidades sin perder su esencia.
El color negro también aportó su cuota de simbolismo. Asociado a la elegancia y la seriedad, es una elección que elimina distracciones y dirige la atención hacia el mensaje que se quiere transmitir. En este caso, su atuendo sencillo pero poderoso resaltó su determinación de mantenerse firme frente a las dificultades legales y emocionales que atraviesa con su ex pareja.
Además de su traje, Wanda complementó el look con joyas delicadas y un maquillaje sobrio que equilibraba la sobriedad del conjunto. Su postura durante la entrevista, con gestos medidos y una expresión tranquila pero segura.