Si sufres de ardor estomacal, hay remedios naturales que pueden ayudarte. Entre todos, uno se destaca. Es una hierba medicinal que se llama congorosa.
“Hoy en día – comenta el especialista en hierbas medicinales Dr.Hugo Golberg - contamos con una planta que actúa sobre varios factores u síntomas de la gastritis en forma conjunta. La congorosa es antiinflamatoria, bloquea los sistemas de generación de ácido e inhibe al Helicobacter pylori, una bacteria que es responsable de la mayoría de los casos de gastritis. "
Lo ideal es consumirla en extracto seco, como comprimidos o en infusión. Para estos casos lo que se tome debe ser después de las comidas, y evitar las hierbas con taninos o amargas, que causan más acidez.
La congorosa es una planta que se encuentra en el norte de nuestro país, en especial en la provincia de Misiones. También es abundante en Paraguay y Brasil. Tiene un uso tradicional desde hace mucho tiempo, por parte de la etnia guaraní.
¿Por qué se produce la gastritis?
Cuando hay gastritis, ya sea un solo episodio o de forma crónica, el tejido que recubre el interior del estómago está sufriendo un ataque de los propios jugos gástricos. Normalmente, el interior del estómago está cubierto por una capa de moco que no deja que los ácidos lo toquen. Pero frente a agresiones por comida, medicamentos, alcohol o la presencia de una bacteria, la Helicobacter pylori, los ácidos estomacales llegan a tocar el tejido y este se lastima, ya sea en forma puntual ( como cuando se produce una úlcera) o en forma de lastimaduras dispersadas por la superficie. El organismo reacciona con síntomas como acidez, ardor en la zona del estómago, a veces dolor y por sobre todo, intolerancia a las comidas.
Otras hierbas medicinales que ayudan
Además de la congorosa, ya establecida como la planta maestra para tratar gastritis y úlceras, hay otras que colaboran en el tratamiento.
- Plantas con mucílagos que protegen la mucosa del estómago: altea, llantén mayor o menor. Ayudan a que el tejido interno del estómago se recupere.
- Plantas antiespasmódicas: melisa, achilea, manzanilla, menta.Tanto la manzanilla como la menta ayudan ya que son antiinflamatorias y antiespasmódicas, Todas estas hierbas se pueden consumir en forma de té.
- Aquellas que disminuyen la tensión nerviosa: son básicas en aquellas gastritis donde se puede establecer que la ansiedad, el estrés, los disgustos, etc empeoran el cuadro. Las más recomendadas son pasiflora, valeriana, melisa, tilo.
Controle la acidez con estos consejos
- Un gran vaso de agua es el primer remedio siempre, porque actúa más rápido que cualquier otra cosa. En un minuto, el agua sube el ph gástrico a niveles menos ácidos y en muchos casos puede ser suficiente. No hace falta que esté helada, por el contrario, esto puede causar un espasmo en el estómago.
- Se debe evitar consumir café, mate, bebidas alcohólicas, bebidas gaseosas, cítricos, alimentos condimentados, chocolate, tomate, cebolla, miel, y cualquier otro alimento que nosotros hayamos detectado como responsable de nuestra acidez.
- Después de comer no debe realizarse ejercicio intenso ni adoptar posturas como agacharse; sin embargo, si se recomienda caminar a ritmo suave.
- No debe acostarse hasta después de 2 o 3 horas tras haber comido pues, al acostarse, los alimentos presionan sobre el esfínter que, en condiciones normales, evita el retorno de alimento al esófago.
- Las comidas deben ser ligeras, sobre todo la cena. Las comidas copiosas son contraproducentes, mucho más si son grasas, pues son más difíciles de digerir y retrasan la digestión.
- Duerma con la cabeza levantada unos 15 cm. Para ello levante la cabecera de la cama o el colchón en la zona de la cabeza. El estar la cabeza más alta que el estómago impedirá el retorno de alimento. El usar más almohadas no es útil. Si puede duerma apoyado en el lado izquierdo de su cuerpo, lo que facilita el vaciado del estómago.
- Si tiene sobrepeso, adelgace. La obesidad aumenta la presión abdominal, fomentando el retorno hacia el esófago.
- No use prendas ajustadas o cinturones alrededor de la cintura.
- No fume porque aumentan la secreción ácida y el reflujo.
- Reduzca el estrés físico y emocional. Si es posible, realice ejercicios: estos fortalecen el sistema inmunológico, sumamente importante para combatir todo tipo de afecciones.
- Si persisten los síntomas, consulte con el médico.