Los músculos y articulaciones de nuestros pies trabajan todo el día y no siempre en las mejores condiciones, por lo que pueden doler,sobre todo si caminamos mucho, debemos permanecer parados durante largo rato o tenemos lesiones previas como torceduras o golpes.
Si sientes que tus pies no apoyan bien y te duelen al final del día, lo indicado es que visites a un especialista, porque hay más de 10 causas frecuentes de pie doloroso. Mientras tanto, puedes probar con estos ejercicios que lubrican las articulaciones y fortalecen los músculos.
Girar los pies.
Con el fin de quitar la rigidez de los pies después de estar mucho tiempo de pie o sentado, es necesario sentarse en una silla, quitarse los zapatos y luego estirar los pies. Luego se hacen círculos con ambos pies, moviendo los tobillos 10 veces a la izquierda y 10 veces a la derecha. Al girar los pies, se debe apuntar los dedos hacia abajo y luego hacia lo más alto posible.
Estirar los talones.
De pie, colocar las manos contra una pared, a la altura y a la distancia de los hombros. Luego, se debe inclinar hacia delante el torso casi hasta tocar la pared con la cara y después hacia atrás, a esa misma distancia manteniendo en todo momento los talones en contacto con el piso.
Rodamiento en el arco.
Sentado y descalzo, se debe rodar con la planta de cada pie una pelota de tenis, de golf, un rodillo de cocina o una lata de gaseosa, de uno a dos minutos.
Ejercicio de estiramiento con una toalla
Para ello, sentarse en el suelo con una pierna estirada. Tomar una toalla de mano con las dos manos, y pasarla alrededor de la planta del pie, manteniendo la pierna recta, tirar de la toalla hacia el cuerpo. Mantener la posición durante unos 30 segundos y luego repetir dos veces.