La creencia popular asegura que comer una manzana al día, mantiene alejado al doctor. Y debe ser cierto porque esta deliciosa fruta que podemos disfrutar en cualquier época del año, está colmada de propiedades y beneficios para la salud:
1. Aporta muy pocas calorías: Posee unas 50 calorías por cada 100 gramos, por lo que es una fruta infaltable en dietas para bajar de peso o para mantenerse en forma.
2. Tiene un poderoso efecto saciante: Para ello conviene comerla con cáscara, la cual contiene pectina, un tipo de fibra que ayuda a saciar el apetito. Es una fruta ideal como colación a media mañana o media tarde.
3. Mejora el tránsito intestinal: Si existen problemas de estreñimiento se aconseja comerlas con piel. En cambio, en caso de diarrea conviene pelarlas o asarlas.
4. Aliada del corazón: Su riqueza en pectina reduce los niveles de colesterol y ayuda a que la grasa no se acumule en los vasos sanguíneos, previniendo así enfermedades cardiacas.
5. Es rica en antioxidantes: Estas sustancias, presentes principalmente en la piel, previenen el envejecimiento prematuro de la piel y la oxidación celular.
6. Combate la diabetes: Tienen un índice glucémico bajo, por lo que no genera picos de glucosa en sangre y pueden ser consumidas por los diabéticos. Asimismo, un estudio realizado a hombres diabéticos en Finlandia, demostró que el consumo de esta fruta, la cual contiene quercetina, reduce un 20% las muertes derivadas por problemas cardíacos y diabetes.
7. En caso de vesícula inflamada, sus taninos actúan como sustancias antiinflamatorias que evitan que la vesícula trabaje en forma forzada y se inflame. Puede consumirse sin cáscara, rallada o cocida.
8. También ayuda a reducir los niveles de ácido úrico. Para ello, realizar un remedio casero hirviendo tres manzanas troceadas en un litro y medio de agua durante aproximadamente media hora. Luego, filtrar y beber.
9. Atenúa las ojeras del rostro: Se puede hacer una sencilla mascarilla casera cocinando una manzana y luego aplastarla hasta formar una pasta suave. Dejar enfriar y colocar sobre los párpados. Retirar con abundante agua fría.
10. Contribuye con la buena salud bucal: Al ser un alimento duro, masticar una manzana después de comer ayuda a limpia la superficie de los dientes, refuerza las encías y disminuye la formación de placa bacteriana. Además, estimula la producción de saliva, ayuda a regular el pH de la boca y a eliminar las bacterias que provocan el mal aliento.