Poco a poco nos vamos despidiendo del frío. Llega la primavera y con ella, los días más largos y cálidos. También es cierto que aparecen las alergias y otras enfermedades propias de este nuevo clima.
La alimentación equilibrada, balanceada es clave para poder encarar el día a día con energía y salud. Verónica Segreto, entrenadora en salud y bienestar, explica: "Siempre está bueno consumir aquello que la naturaleza nos ofrece en cada estación. Es lo más importante porque esos alimentos serán los que nos aporten lo necesario para cada etapa, como por ejemplo, los cítricos nos dan la Vitamina C que necesitamos para pasar el invierno".
Ahora bien, ¿cuáles son nuestros aliados para esta primavera? Segreto nos sugiere los siguientes:
Huevo: es fundamental porque aporta proteína de alto valor biológico. En los 80 estuvo muy discriminado porque se creía que elevaba los niveles de colesterol en sangre. Hoy en día está demostrado que no hay relación directa entre su consumo y el colesterol alto.
Pescado: sobre todo los azules que son antiinflamatorios, ayudan a reducir los triglicéridos y la presión arterial. Además aportan calcio, fósforo y vitaminas como la D, A, B1 y B12 entre otras. 12 y la 6. El salmón, las sardinas, la trucha, el boquerón, la caballa... todos son buenos.
Palta: es nutritiva, aporta potasio, ácidos grasos buenos para la salud del corazón, tiene fibra. Muy discriminada en el pasado porque se decía que engordaba pero en realidad es una grasa saludable que no puede faltar.
Frutas y verduras de estación: son las que te aportan los antioxidantes que sustancias naturales que retrasan el envejecimiento celular. En la Argentina tenemos, por ejemplo, la remolacha, el zapallito, el puerro, la lechuga, nabiza, nabo, acelga, apio, alcaucil, espárragos, frutillas, frambuesas, arándanos, manzanas, naranja, ananá, banana y limón.
"Otra cosa que para mí es clave, es el consumo responsable de vitamina D a través de minutos de sol. Ojo, hablo de consumo responsable. No quiero decir con esto que hay que salir en traje de baño a tomar dos horas de sol a las tres de la tarde. Es simplemente exponernos unos 10 o 15 minutos diarios al contacto con la luz de sol... nos da energía. Con la pandemia y el encierro, hay mucho déficit de esta vitamina", resumió Segreto.