Numerosos estudios médicos ya comprobaron que los frutos secos como nueces, almendras, nueces pecan, castañas de cajú, avellanas, pistachos e incluso maníes son mucho más convenientes como snacks frente a las galletitas, aún en poca cantidad; si lo que buscamos es bajar de peso, mantenerse y sobre todo, proteger el organismo de enfermedades.
En un estudio en más de 300.000 individuos, específicamente 373.293 hombres y mujeres, de 25 a 70 años de edad, reclutados entre 1992 y 2000 de 10 países europeos en el estudio European Prospective Investigation into Cancer and Nutrition (EPIC), se concluyó que aquellos que consumieron más frutos secos durante cinco años ganaron menos peso. Y además:
- Consumir frutos secos más de tres veces a la semana reduce el riesgo de obesidad respecto a ingestas menores de ellos.
- Añadir frutos secos a las dietas no eleva el peso
- Reemplazar snacks basados en harinas por frutos secos ayuda a perder peso
A pesar de ser alimentos que contienen muchas calorías en poco peso, debido a que son ricos en aceites e hidratos de carbono, los frutos secos en general tienen muchas ventajas,
- Alto poder saciante, gracias a su contenido en proteína, fibra y grasa
- Mayor compensación. Los frutos secos te hacen comer menos en el resto de comidas, compensando hasta en un 65-75% las calorías ingeridas
- Mayor adherencia a la dieta al ser aceptados por nuestro cerebro como un alimento placentero
- Baja absorción energética. Como detalla el estudio, la masticación aumenta la absorción, pero las calorías desechadas son elevadas en todos los casos. Este esfuerzo puede elevar además el metabolismo, aumentando el gasto calórico.
¿Beneficiosos para el corazón?
Sí, también para el cerebro, los intestinos y el organismo en general. Son semillas y como tales su potencial alimenticio es alto.
Contienen los ácidos Omega 3 vegetales, los ALA, y también minerales y polifenoles, que son sustancias antioxidantes. Los maníes en sí no son de los más beneficiosos, pero integrando un mix lo hacen más accesible y hacen que se genere más serotonina en el cerebro, lo que mejora el ánimo y el sueño.
Mayor consumo de frutos secos se asocia a menor riesgo de enfermedad coronaria. En especial, las nueces mejoran la función endotelial ( tejido interno de las arterias) en pacientes con colesterol alto y mejora el nivel de melatonina, una hormona fundamental como antioxidante natural, regulador de los ciclos sueño vigilia y del crecimiento celular.
También se sabe que consumir entre 30 y 50 gramos de frutos secos dos veces por semana se asocia con una reducción del 32% del riesgo de desarrollar síndrome metabólico y diabetes, mejoran las funciones cognitivas cerebrales, aún como prebióticos aumentando la diversidad de bacterias intestinales beneficiosas y ayudan a prevenir el cáncer.