Si tu organismo necesita quitarse de encima tóxicos, líquidos retenidos e inflamación, no hay ayuda más fácil de conseguir que el apio. ¿Por qué? Te lo contamos.
El apio, rico en aroma, se destaca más por su cualidad de regulador de la dieta y equilibrante que por su valor nutritivo. El 92% de su peso es agua, aporta poquísimas calorías y tiene un gran poder saciante. Al aportar mucho más potasio y magnesio que sodio y su contenido del aceite esencial apiol, constituye un buen diurético, y por su capacidad de alcalinizar la sangre estimula la depuración del organismo, eliminando el ácido úrico y otros residuos tóxicos.
Esto, unido a la acción de la apigenina, una sustancia con propiedades vasodilatadoras, lo hace adecuado para prevenir la hipertensión arterial y otros trastornos cardiovasculares.
Baja la tensión arterial
En una comunicación, publicada en Mayo del 2006 en la revista American Journal of Phatology, por médicos de la Universidad de Porto en Portugal, señala que la apigenina del apio combate el estrés oxidativo a nivel celular y actúa como antiinflamatorio natural. El estrés oxidativo contribuye al proceso del endurecimiento de los vasos sanguíneos, que a su vez, genera la hipertensión.
Otra sustancia del apio, el 3-n-butilftalido, disminuye la concentración sanguínea de las hormonas asociadas con el estrés, llamadas catecolaminas, que producen constricción de los vasos sanguíneos. Por esta razón el apio puede resultar aún más benéfico aún para quienes sufren de hipertensión asociada al estrés y la tensión emocional.
El apio, por otra parte, es un buen regulador del tránsito intestinal. Previene el estreñimiento, favorece una buena digestión, estimula los jugos gástricos, combate los gases, la hinchazón abdominal y el exceso de gases.
Cómo se consume mejor
Algunas personas no gustan del sabor del apio, por lo que es más fácil incluirlo en forma medicinal, en infusiones que pueden ser de semillas u hojas, combinadas con otras hierbas de sabor agradable como menta, o manzanilla, cedrón, tilo, etc. Solo es necesaria una cucharada de hojas frescas picadas por taza de agua hirviendo si se toma solo. Hay que dejarlo infusionar 5 minutos y beberlo, 3vecespor día. Con esto se puede aliviar la distensión abdominal, e incorporar antioxidantes, aunque no es eficaz si hay constipación.
Para obtener todos los beneficios del apio lo ideal es preparar todas las mañanas un licuado de una rama de apio ( blanco y hojas) y agua, a lo que podemos agregar manzana verde, jugo de naranja, por ejemplo. Si la idea es un batido detox super efectivo, al apio le podemos adicionar té verde, espirulina, espinaca fresca o tomate.