Recientemente en un artículo de la publicación de la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard, se publicaron estos pasos que podemos intentar ( y no hace falta que sean todos a la vez) para ir mejorando nuestra salud. Algunos no son muy complicados, otros requieren más esfuerzo.
Lo que destacan los editores es que cada uno puede confeccionar su propia lista de pasos adaptada a su caso particular, tomando en cuenta que no sirve de mucho pensar en lo que hemos logrado en el pasado sino en lo que podemos hacer aún.
Aquí hay algunos pasos sólidos para comenzar:
Respire profundamente cada día. Unos minutos diarios de respiración lenta y profunda pueden ayudar a reducir la presión arterial y aliviar el estrés. En internet hay gran cantidad de videos que pueden guiarnos en rutinas de relajación basadas en la respiración.
Haga un cronograma eficaz para exámenes y visitas de salud. Los ojos, la piel, un dolor, todo podemos cuidarlo mejor y encontrar soluciones para problemas menores que no siempre son costosas. Los chequeos médicos cardiovasculares son importantes, pero también todo lo que afecta nuestra calidad de vida.
Invierta en un par de zapatillas cómodas. El equipo inadecuado puede sabotear cualquier rutina de ejercicios e incluso desalentarnos de salir a caminar. Búsquelas con buen soporte en el talón y que tengan el ancho adecuado para su pie.
Consiga un nuevo par de gafas de sol si las antiguas tienen lentes desgastados. Asegúrese de que el nuevo par tenga protección UV (una capa especial) para bloquear la luz ultravioleta (UV) del sol, ya que ésta que puede causar daño ocular y provocar una pérdida permanente de la visión.
Haga algunas citas con amigos. Estar conectado socialmente evita la soledad y el aislamiento; nos proporciona momentos felices y puede ayudar a reducir ciertos riesgos para la salud. Trate en lo posible de que sean visitas cara a cara, que no tienen comparación a una videollamada.
Haga una limpieza profunda en una habitación de su casa por semana. El polvo y el moho pueden provocar alergias, asma e incluso enfermedades. Además, la sensación de limpieza y orden tiene un efecto relajante y reconfortante.
Investigue aplicaciones de salud gratuitas. Su celular puede ser un aliado para cuidarse. Desde alarmas para tomar medicamentos a guías para caminar, hacer dieta sana, hacer juegos de ingenio y muchas más están allí. Busque buenas críticas, fuertes barreras de privacidad, aplicaciones que no recopilen demasiada información sobre usted y aquellas que sean populares, con cientos de miles o millones de descargas.