La tostada con palta es el nuevo desayuno cool y sanito, y no es para menos. Recomendada por numerosos nutricionistas, esta fruta tiene más de una ventaja frente al desayuno dulce tradicional.
El aguacate es un alimento cuyo valor ha sido rescatado en los últimos tiempos porque es rico en ácidos grasos saludables (principalmente monoinsaturados), fibra, folato, vitamina E (que tiene propiedades antioxidantes) y potasio.
Este contenido nutricional hace que el aguacate tenga un impacto beneficioso en la tensión arterial, los niveles de colesterol en sangre, la salud intestinal y la función nerviosa. Los aguacates también contribuyen al buen funcionamiento del cerebro y a los embarazos saludables. Además, ayudan a mantener la saciedad durante más tiempo que los alimentos bajos en fibra y grasa, por lo que permiten evitar "bajones de azúcar" y ataques de hambre a media mañana, comunes en quienes consumen desayunos con mucho azúcar.
Un detalle importante: Aunque la palta tiene todas estas propiedades beneficiosas, debe consumirse en pequeñas cantidades porque su alto contenido en grasa puede suponer una ingesta excesiva de calorías. También hay que tener en cuenta cómo se lo prepara para que incorporarlo resulte agradable y no suponga un exceso de calorías, aunque no tenga azúcares.
¿Cómo preparamos la palta?
Cruda, la abrimos justo antes de consumirla, la rociamos con jugo de limón y de acuerdo con nuestras necesidades nutricionales, podemos añadirle huevo duro o queso crema (para sumar proteínas) brotes vegetales o semillas, por ejemplo. No es necesario agregarle aceites u otras grasas porque ya tiene una textura cremosa y bastantes lípidos en su composición.
También se puede incorporar como ingrediente en batidos, porque como tiene un sabor neutro, admite la compañía tanto de frutas como de verduras. Incluso se puede hacer un smoothie de chocolate con leche vegetal (almendras, avena, arroz) cacao y edulcorante.
Si lo comemos con pan, es recomendable que este sea tostado e integral, lo que garantiza una mejor digestibilidad de las harinas y un índice glucémico ligeramente menor.