Si bien la propiedad más conocida del ajo , conocida desde la antigüedad, es la de antibiótico natural, existen otras muy valiosas que muchas personas no conocen. Un ejemplo es que se puede utilizar para el tratamiento natural de la hipertensión arterial.
El ajo que se utiliza como condimento, particularmente en la cocina española e italiana, posee diversos nutrientes, especialmente los aminoácidos ajoeno, la aliína y la alicina, que aportan excelentes beneficios al sistema circulatorio. Su acción se explica porque previene la producción de angiotensina II, mejora la disponibilidad de óxido nítrico y aumentar la producción de sulfuro de hidrógeno. Esto hace que las arterias se mantengan más dilatadas, lo que resulta en una disminución de la tensión arterial. Sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes también contribuyen a disminuir el colesterol circulante en el organismo.
Para numerosos pacientes de hipertensión, realizar un tratamiento con ajo puede ser una muy buena opción, gracias a que sus efectos secundarios son insignificantes, a diferencia de algunos fármacos para este problema tan común. Asimismo, acompañar con ajo el consumo de medicamentos que el médico receta puede ayudar a ofrecer resultados más rápidos, con menos dosis que las normales.
Cómo actúa
Es un alimento:
- Antioxidante.
- Vasodilatador.
- Hipotensor.
- Fluidificador de la sangre.
- Con propiedades cardiotónicas.
- Que disminuye el riesgo de placas de ateroma, gracias a sus flavonoides
- que disminuye los triglicéridos y el colesterol en la sangre.
¿Cómo se debería consumir?
Los expertos en medicina herbolaria alertan sobre este punto en específico, porque para que mantenga las propiedades, el ajo debe consumirse crudo. Un diente de ajo picado agregado a cualquiera de las comidas del día ya puede hacer la diferencia.
Otra alternativa es preparar un aceite de ajo, utilizando preferentemente aceite de oliva. Para ello podemos picar los dientes de una cabeza de ajo y colocarlos en un frasco con 1/2 taza de aceite, que guardaremos en lugar fresco para consumir una cucharada diaria. Estos remedios caseros con ajo no solo mejoran la salud arterial, sino que además tienen efecto antiparasitario y antibiótico, contra bacterias y hongos.
También es posible encontrar presentaciones de extractos de ajo en farmacias.