Son muy comunes los resfríos y estados gripales en esta época y habitualmente recurrimos a medicamentos que alivian los síntomas como la secreción nasal, la tos o el catarro. Una alternativa natural para este problema es recurrir a hierbas medicinales, ya sea en forma de infusiones con las hojas secas o en tinturas madres. Otra opción es elaborar jarabes, en base a la tintura madre, a la que se adicionan 3 partes de almíbar liviano, o miel.
Entre todos los remedios caseros para la gripe, hay una hierba que se destaca por sus propiedades. Lo mejor de todo es que como se trata de una hierba muy común en el uso culinario, podemos tenerla ya mismo en la cocina. Se trata del tomillo.
El tomillo es rico en sustancias con acción antiinflamatorias, expectorantes y antitusígenas, como el carvacrol y el terpineno, que ayudan a eliminar el exceso de mucosidad de las vías aéreas y combatir la tos, causada por resfríos, bronquitis, asma, inflamación de la faringe o estados gripales.
La mejor y más efectiva manera de tomar tomillo para reducir la tos, es en gotas, de una tintura de hierbas. Las tinturas madre de hierbas medicinales son extractos hidroalcohólicos que se pueden obtener en las farmacias o elaborarse en forma casera, pero requieren tiempos de maceración de por lo menos 15 días. La dosis recomendada es de 40 gotas veces al día en agua.
También puede dar alivio como té de hierbas o infusión. Añadir una cucharada de miel cruda en una infusión puede hacer más afectiva la acción del tomillo. Para preparar una infusión de tomillo, ponemos una cucharadita de hierba seca en una taza y le agregamos agua hirviendo. Dejamos reposar durante 5 minutos y bebemos luego de colarlo. Esta infusión de tomillo podemos tomarla 3 veces al día.